martes, 21 de diciembre de 2010

USA II: EN BOSTON

Por: El Papirri

Llego a un Boston tibio, en la parada trucha de buses chinos me espera un compa chileno de nombre Sergio Reyes, sesentón, barba blanca, con acento medio gringo, Es que vivo acá desde el golpe de Pinochet, dice como masticando algo. Vamos a su departamento, me entrega dos panfletos con una estrella roja de fondo, uno de la marcha de organizaciones sociales y otro de mi concierto. Era 1o de mayo de 2008 y Reyes- ex militante socialista- le daba duro a las saudades revolucionarias en USA organizando estos eventos. En el departamento, la esposa de Sergio- una señora chilena amable- sirve un tremendo desayuno, cuenta que su hija vive en Santa Cruz, que ama Bolivia. Breve descanso, duchita y directo al acto por el 1o de mayo en el centro de Boston, en un parque fastuoso rodeado de árboles esbeltos y edificios patrimoniales. Una cúpula para retreta en el centro del parque había sido transformada en escenario, un grupo de regge saltaba letras en englishñol con protestas contra el sistema. Jaleaban talvez cien personas sentadas en el pasto, parejas plurimultitutifruti con aretes y tatuajes, todo un mini Woodstock. Mientras Sergio cantaba a Violeta Parra, un compatriota orureño de nombre Jhonny se acerca a hacerme una entrevista para su programa de folklore andino en Boston.

Pasan rozando los caballos con policías encima, parsimoniosos, amenazantes en sus cachiporras. Sergio me llama al escenario, un saludo desde Bolivia digo ante la ovación y ahí nomás lanzo canciones de protesta que me salen de la memoria más remota mientras en el fondo veo que se acerca una contramarcha republicana con sus carteles pulcros contra el comunismo. El público siente aquello, la actuación se acaba rápido, se paran, se ordenan en cuadrados estilo guerra medieval, poco a poco los bandos se aproximan; Jhonny de Oruro me llama, aparecemos adelante, los caballos con sus policías van creando una frontera invisible para que las marchas no se encuentren en un topetazo. A dos metros, una gringa parece insultarnos con cara despiadada, el Jhonny le responde, se putean en ingles perfecto, pregunto a los gritos que dice, el orureño traduce que se queja porque no puede terminar su maestría por culpa de los migrantes, Yo le respondí tan vieja y haciendo maestría…dice el Jhonny riendo con su k’asa. Un gordo amarillo con cara de buldog amenaza con su bate de béisbol, le hago la señal de pija con los dedos, el rollizo decide embestir, se tropieza cayendo de nariz, la sangre pinta el pasto, dos gringas aúllan, llega la ráfaga violenta de gas lacrimógeno. Terminamos corriendo adelante de los caballos hacia el cuarto piso de uno de los edificios patrimoniales donde se daría el recital. Jhonny me ayuda con la guitarra.

Entramos a una sala bonita con unas 100 butacas, probamos sonido mientras algunos marchistas se lavan los gases de la cara. Entonces aparece el Larita, un batero que estudiaba música en Berklee, nos abrazamos, habíamos tocado alguna vez con este músico boliviano alemán que cargó su bombo para que tocáramos juntos y así fue. El concierto en dos partes transcurrió con excelente atención y disfrute de la gente que participaba, reía, lloraba y al final bailaba. Vendimos disquitos, ganamos hasta para pagarle al Larita. Fue la primera vez que toqué en un cuarto piso.

Terminado el recital, nos fuimos al restaurante mexicano del piso uno a comer y beber cerveza Tecate, gritábamos vivas por el 1o de mayo, gloria a Víctor Jara, Jhonny se inflaba morado con los vivas a Sacco y Vanzeti.

En lo mejor de la fiesta, yo debía partir a Nueva York para continuar la tournee. Entonces Sergio organiza una comitiva intercultural bien chispeada para despedirme en la terminal de chinos de Boston. Un argentino de aretes emparejado a una hindú bostoniana comandaban la corte clamando un hip hop con rimas sobre Bolivia, un mulato haitiano de Hawai le daba duro a una especie de vuvuzela de caña, otro barbudo

con acento chileno cubano levantaba la mano gritando viva Fidel, Jhonny raspaba la Tecate como matraca. Me despidieron en coro general con Te recuerdo Amanda. Mientras el Bus partía se escuchaba en lontananza Manuel, Manuel, Manuel, el Larita me hacia señas telefónicas y Reyes se inflamaba de canciones.

USA I: EN NUEVA YORK

Por: El Papirri

Algunos compatriotas en USA querían escuchar al Papirri en Vivo. Fue así que en Abril viene la gira de conciertos por la Costa Oeste de USA. Llegando a Miami el maltrato en el Aeropuerto es insólito, me encierran en un cuarto, me quitan el atril, rajan el charanguito al inspeccionarlo, asustado llego a Washington. Por suerte esperaba en el Aeropuerto un gran tipo, el inolvidable Ivan Dávalos. Me aloja en una boardilla tierna de su casa que topaba de frente a un bosque con bambis que nos saludaban todos los días. En las mañanas estudiaba el repertorio, cambiaba cuerdas, abría la heladera y tomaba yogurt. En las tardes prueba de sonido y conciertos varios por DC. La esposa e hijos de Ivan, solidarios, generosos, me ayudaban a vender discos en los recitales, para ganarme alguito pues. Entonces, una ex que vivía en Nueva York se entera de mi estadía placida, me ubica y decide joderla.

De nombre Soraya, había sido mi amante en varias épocas, alguna vez de ch’aqui le prometí matrimonio. Plantea que la visite para ver posibilidades de actuación, no había tocadas los próximos tres días, decido ir a conocer la Gran Manzana tomando un bus chino de 30 dólares de WDC a NY con despedida cariñosa y preocupada de mi familia Dávalos. Llego al China Town, aparece Soraya puro stress en su carro, me deja solito en la quinta avenida para parquear, camino provincianamente hasta las ex torres gemelas, unos peruanos me venden postales del 11-S, les invito una lata de cerveza, me subo a los hombros del gigante de Piura que cobraba un dólar por mirar sobre las calaminas de las caries en construcción. En pleno equilibrio aparece Soraya stress, vamos al Impair State grita, rozamos el perfumado Central Park, una ráfaga de oros por el Rockefeller Center. Al trote llegamos a un puerto, remontamos al Ferry perezoso, las gaviotas congratulan, la estatua de la libertad al fondo parece de cartulina, Manhattan expande sus rascacielos, el sol acaricia la espuma, saca fotos con su cámara, nos hurgamos, me cuenta que su concubino albañil porteño es muuuy celoso, terminamos almorzando de tardecita en Queens. A la sazón aparece una gorda beniana de nombre Ana, hacen el enroque, me lleva a su casa en una van, su marido pelado puertorriqueño puteaba en ingles, no sabían que hacer conmigo pues me convierto en testigo incomodo de sus frustraciones. En la noche, la pareja me lleva a Time Square, pasamos el puente destellado, quedo cojudo por las luces de la Gran Manzana, respiro Broadway. Luego, cena silenciosa por el cumpleaños de su joven hijo con retardo que llega con Soraya stress. Proponen hacer un concierto en Queens, en el Restaurante Peña Copacabana, separamos la fecha. Volvemos cabeceando a la casa del pelado, duermo mal con el joven especial de vecino recitando en voz alta poemas de Rimbaud. Al día siguiente Ana la beniana me deja en el China Town, le casco una sopa de fideos suculenta retornando a la placidez de mi familia y a continuar con los conciertos en Virginia que algún día recordaré.

A la semana, Soraya llama al teléfono de la casa, dice que la beniana le había depositado en su cuenta el 50 % del cashe (250 dólares).Entonces viene el retorno a Nueva York previo concierto un día antes en Boston (de los mejores de la tournée). Directo a la Ban beniana, a probar sonido en Queens mientras van llegando haaartos cochalas con ansias de llorar kaluyos. De telonera se presenta por media hora una cantante digito tres de Sucre. Con unas tetas descomunales, buenas curvas y voz afinada roncea la manta con sus pistas de morenadas, unos 50 paisanos revolean el cacho, brindan, babean. La cantante de nombre Sheila dice: es un orgullo presentar al cantautor, desde Bolivia, Manuel Chazarreta. Entro a escena, combino mis canciones con repertorio de farra colegial, salgo sudado de bises. Soraya no aparece nunca.

Cuando voy a cobrar el cashe acordado, Ana la beniana me dice que le había depositado todo a Soraya, que no tenia nada para mí. No me quiere prestar el celular para llamarla. Quedo atónito, solo, en la puerta de Queens sin saber pa’ donde ir, son las 3 de la mañana, menos mal tengo quibo del concierto de Boston. Atrás, la farra se pone más densa. Entonces aparece como una visión nashonal Sheila, me agarra del brazo, caminamos media hora con mi maletita con rueda k’asa, subimos a su kitchinette, no tenia cama, dice que las termitas se la habían comido, nos recostamos en un sleeping. Luego de un cachascan intenso, que si que no, examino las tetas más sabrosas de la década, su perfume oriental me ahoga. Dormimos acurrucados un par de horitas, charlamos sobre sus hijitos que están en Sucre, desayunamos chocolate, Que increíble lo que te hicieron, hasta a mi me pagaron, dice en soprano; yo quiero más de ella pero debe irse a trabajar a una fábrica de fideos. Me deja con gesto dulce en un tren hacia China Town, vuelvo a Washington con el abismo de la estafa, tratando solo de recordar Boston y las tetas de Sheila.

YO SOY PLURINACIONAL E INTERCULTURAL

Por: El Papirri

Para concluir este año con mis crónicas semanales les cuento que estuve participando en el “Encuentro Internacional sobre el Estado Plurinacional e Intercultural, Sumak Kausay y Derechos de la Naturaleza” realizado los días 13 y 14 de Diciembre de 2010 en la Sede FLACSO-Ecuador, con la participación de académicos, dirigentes de organizaciones y lideres espirituales de Ecuador, Bolivia, Brasil, Argentina, México, Guatemala y Perú. De tanto escuchar ponencias encontradas, llego a la culminación de que yo mismo soy un producto intercultural nacido de encuentros plurinacionales. No es por alaraco, desde hace siglos voy siendo así.

Atisbando mi historia por vía materna llego a vislumbrar a la madre de mi abuelo, Agustina Chazarreta, matriarca de luz propia, de estirpe vasca mestizada en la campiña del chaco; se sospecha que apareció un mulato uruguayo anónimo, bohemio y cantor, que la enamoró hasta perder la lucidez y de aquellas noches de pasión clandestina nació mi abuelo Andrés Chazarreta quien ejerció el apellido materno-ante la disipación del moreno cantor- naciendo un mulatovasco de gran talento musical, hoy declarado padre del folklore argentino. De allí vienen mis churcos, mi amor por el blues, la bossanova, el tango y mi testarudez crispada. Alguna vez me mostraron una foto del abuelo Andrés con su hermana y tías: parecía una banda de gospel del Mississipi. Andrés enamoró perdidamente a la hija del italiano Antonio Palumbo quien había llegado desde Napoli a fabricar vinos y quesos en una hacienda del chaco en Manogasta (de allí viene mi entusiasmo por el trago y mis ataques de ira). Mi abuela Anita Palumbo Orellana, mestiza napolitana con sangre quechua (el tano se casó con chaqueña), procrea una niña hermosa poblada de rulos, la bella vascoafroitaloquechuaespañola Anita Chazarreta Palumbo, mi madre, quien fuera eximia concertista de guitarra y bailadora de chacareras. En cuanto a los volcanes y nevados genealógicos de mi padre, alcanzo a mi abuela Concepción Block que traía genes de Alsacia-donde será?- mezcladitos con chicharrón cochala quechua. La abuela Conchita se enamoró irremediablemente de un mestizo bi sanguíneo aymara español de Antofagasta (entonces Bolivia) mi abuelo Manuel, naciendo los ríos plurinacionales del papa German, fornido mestizo alsacioaymaraespañolquechua .

Entonces, compañeros, me declaro full color, componente del multiverso, militante de la diversidad. Soy vascoafroaymaraalsacioitaloquechuaespañol, un menjunje digno del paradigma de la complejidad, por eso toco la guitarra a veces como charango, a veces como batucada, cantando con voz de migrante tanguero y con la musicalidad vital de una tarka que zapatea esta múltiple esencia. Por eso, hermano indígena dirigente, no me mires raro en este Encuentro, no exijas que sea mono racial, muchas razas navegan por mi alma y no tengo la culpa. Soy un verdadero ch’enko total a puro orgullo, un combinado plurinacional tejido en el amor intercultural, fruto hibrido inconcluso de nuestro continente. Por esto, hermano afroecuatoriano que me miras como diciendo que haces en este Encuentro, no me pidas que tenga un solo color, tengo una whipala derretida en las venas.

Me hubiera gustado parlar mis siete lenguas, reunirme con mi familión planetario en esta navidad y festejar que somos hijos del cosmos, padres del mestizaje, nietos de la diversidad plurinacional amasada con pasión intercultural. Difícil es . Me queda ejercer la defensa total de lo plurimultituttifruti y ser insurrecto con los racistas, con los imperialismos que tratan de imponer un solo modo de ver la vida y desprecian las autodeterminaciones, con los supuestos mono-sanguíneos (lo serán?) que a veces creen

pertenecer a una tribu superior. Por eso hermano anglosajón del gollete rojo, no me pidas que sea parte de occidente, occidente es solo una parte mía.

Soy un mixto florido, confundido y romántico que solo quiere dar y recibir humor y amor, militante activo de la cuna planetaria de la sensibilidad; humanista- animalista de una minoría absoluta que cree posible un mundo poblado de paz y mira al prójimo con la ternura y comprensión desde su alma atravesada. Hey dicho. Felices fiestas. Manuel Fernando Monroy Chazarreta Block Palumbo Misky Chami Matoko.

jueves, 28 de octubre de 2010

O CONTRERAS

Por: El Papirri

Fui muy injusto con este recuerdo, está por fallecer. No lo puse en la web, ni en un blog, ni siquiera lo usé como clave, pin o contraseña. Hoy deseo impulsarlo, esta raído como enredadera de luto, hay que sacudirlo, remojarlo, darle respiración boca a boca, ojo a ojo: recuerdoooo… salí, pues¡ le grito desde el balcón de mis canas. Entonces sale tímido y dice: era una reunión de músicos creadores de canciones alternativas, así le llamaban, también le decían talleres de música latinoamericana, hubo uno en Sucre, otro en Rosario, en Montevideo y este, en Río de Janeiro. No sé como llegué, dice el recuerdo. Solo tengo la imagen galopando en un bus por los morros verdes de Río en una portentosa visión, el mar latiendo al fondo, las favelas floreciendo calzones con beleza vehemente, Ipanema que pasa en flash, subimos, subimos hacia un centro de retiro espiritual en Barra de Tijuca (gracias, recuerdo). Como cuentagotas llegábamos los futuros amigos, caras conocidas, uruguayos con mate en la mano, porteños barbudos, brasileritos livianos, todos poetas y músicos. Nos abrazamos con el talentoso Jorge Fandermole, lo había conocido un año atrás en el Taller de Rosario, la mano de lejitos con el siempre parco Leo Masliah, nos besamos locamente con Joyce, la carioca de luz propia .Un flaco biliatico, hermético dicta la primera clase sobre la actualidad en la música contemporánea, se llamaba… Guillerme de Alencar Pinto (gracias, recuerdo) pianista, compositor de cosas difíciles. El uruguayo Jorge Lazaroff, búfalo bondadoso, provee una brillante aula sobre el texto en la canción. Una tarde nos metimos todos a la piscina, caminamos en el agua, carcajeamos mientras anochecía sobre el picante azulado de las lomas; con mate y todo se metió Carlos Aguirre, eximio pianista y compositor. Al día siguiente, mesa redonda y me ponen representando a Bolivia. Era 1986 (gracias, recuerdo), en la testera los nombrados, entonces llega a sentarse a mi lado, como un milagro, en mi hombro se escuchaba la respiración entrecortada de Chico Buarque¡ Saluda estresado. En el proceso resulté discutiendo- yo, llok’alla de mierda - con Chico que afirmaba que Schoenberg había iniciando la música contemporánea y yo dale que no, que Stravinski y nos pasamos lidiando cosas que en realidad no sabíamos bien. Por suerte Fandermole empezó a hablar del papel del cantautor en el contexto social y ahí se diluyó. Chico me miraba raro desde sus ojos verde acuosos, desde sus ojeras plomas, desde sus rulitos de niño cusqueño. Yo era tan pobre en la época que no tenía cámara de fotos. Entonces llegó el taller de musicalizacion de Masliah con sus trampas creativas, los serios directivos me desafían para que la noche siguiente toque en el concierto en Vivo junto a Joyce, Leo Masliah y el recién incorporado Litto Nebbia. Otra vez en bus bajamos raudamente la ladeirinha, el mar cárdeno codeaba carabelitas, el sol achicharraba a los pixotes que acometían con algún gringo en Ipanema. Cruzamos por un puente que parecía árabe llegando al Circo Voador (gracias, recuerdo), un lugar de shows cariocas.

A la sazón escuché a Nebbia tocando con un saxofonista, luego entró Masliah con el Perro de Mozart, unos 500 cariocas vagos de playa, en bermudas y cervecinha en mano, querían mas ritmo. Se escuchaban algunos aplausos. El animador dijo: da Bolivia, Manuel Mongoooi…ingresé tocando el llockallita moco tendido en charango, luego Hasta ahurita, Hoy es domingo, hasta llegar a El Contreras, una canción que nunca mas canté que tenia un coro de infortunados que me gritaban: El Contreras¡¡tatantatá, El Contreras tatantatá¡¡ Al inicio, la canción describía: tendría que hacer una canción decente/ con buena rima emocionar a la gente. Entonces me lanzaba con un preludio de Bach en el medio, un bolerito y de pronto: pero no hay caso, porque yo soy ps el Contreras/ y yo le canto a la grasa de tus manos que hacen bailar a los chorizos frescos/

el Contreras¡ y yo le canto a la enorme carcajada de tu zapato mostrando los dedos/ el Contreras¡ a tu mirada sabia, aymara…O Contreras…el tatantatá se volvió batucada en las botellas, O Contreras¡ la playa se vino al Circo Voador, O Contreras¡ gritaban los cariocas en sus sandalias bailarinas, O Contreras¡ me bajaron del escenario integrándome a la fila india que desembocó en Leblon, las garotinhas con sus tetiñas exclamaban O Contreras¡ y aquella caipirinha generosa que pasaba de mano en mano, de tanga en tanga, y yo, O Contreras¡ tan feliz…

Gracias recuerdo que me transportas a aquellos mares soberbios, a esos olores rotundos, a esas pieles tostadas, a esos labios de mulata jugosa, hoy, en esta tarde chinchosa quiteña. Gracias por resucitarme, recuerdo mío, dedicado al Gonzalo “Loco” Chávez (hoy fino técnico de Harvard), y al Aquiles Dávalos (brillante arquitecto de oeneges), dúo de testigos nashonales, agitados integrantes de esta novísima Escola du Samba du Morro de Tijuca O Contreras.

domingo, 10 de octubre de 2010

CRONICA DE UNA VIDA SALVADA

Por : El Papirri

Varios amigos me piden que escriba algo sobre la crisis ecuatoriana, van mis impresiones .El jueves 30-S queda como fecha trágica para el Ecuador, hoy se lloran 13 muertos, 274 heridos, aun no se tiene la cifra exacta de las victimas. Aquella mañana fui a trabajar con normalidad, redacté cartas, envíe mails laborales, saliendo a las 10:00 a una reunión en Casa de la Cultura Ecuatoriana para cerrar que nuestro IV Ciclo de Cine de Bolivia en Ecuador se va para 9 ciudades. Trepo a la Ecovia -un bus largo con carril propio, incomodo, sudoroso-de pronto frenada torpe, el chofer grita: tienen que bajarse, el bus de adelante fue asaltado¡ Brotamos a las calles desoladas, nos esparcimos temerosos, en la esquina dos morochos lo asaltaban a un tipo a puñetazos, ni un policía, 4 bancos atacados , cientos de almacenes saqueados, indicaba la radio. Entonces supe del levantamiento policial. Llame a mi esposa que despavorida emergía del Moll con sus bolsitas y un aire de tsunami. A medio día distingo en la tele al Presidente Correa que discurseaba en media sonrisa, Correa más sulfúrico, Correa se saca la corbata ante silbidos, protesta irritado. Estaba nada menos que dentro del principal Regimiento de la influyente policía quiteña, prácticamente solo, tratando de exponer la ley emitida, rodeado de intimidación. Estalla el caos, un gas le revienta en la cara, unos tipos le querían sacar la mascara de protección que su escasa seguridad trataba de ponerle. Con 22 puntos en la rodilla recientemente operada, el Presidente cojeaba en un cerco de gases, lo abucheaban, apenas respiraba. A las rastras trepa un milagroso cerco que daba al Hospital de Policías, ahí se nota la división de la revuelta, no todos los policías querían arrollarlo. Luego brota la marcha de rescate a la cabeza del Canciller Patiño con 6.000 ciudadanos recibidos por la policía con gases y balas. Al Canciller Patiño le abren la cabeza con un palo policial. Un joven muere con el cerebro despedazado de balas.

Es en aquel momento que el ejército decide intervenir y mandar a sus Grupos de seguridad para el rescate del Presidente Rafael Correa, revivido y prácticamente secuestrado en el Hospital Policial .A las 18:00 se inicia una balacera entre los rescatistas militares y los sublevados policías, caen varios muertos. A las 19.30 la Televisión Publica ecuatoriana es intervenida por civiles, se distingue a operadores del derechista ex Presidente Lucio Gutiérrez quien era constantemente vitoreado por los policías sediciosos. Los representantes de la derecha en la Asamblea ecuatoriana-en el peor momento- salen a pedir amnistía para los agresores solicitando la derogación de la ley del Servicio Publico causante del problema, que según los especialistas no es mala, es anti- prebendas. No era un problema salarial. Los policías ecuatorianos ganan 900 dólares de base desde que Correa esta en el gobierno, los capitanes 2.500, 3 veces más en estos 4 años. Sin embargo, muchos de ellos dispararon al pueblo sin piedad y mataron a condiscípulos. El rescate del Presidente fue de alto compromiso .Salio en medio de ráfagas, atormentado, directo al Palacio de Carondelet. A las 21.00 era recibido por una ingente manifestación de gentes en lágrimas. La energía le dio para discursear y dar entrevistas.

En la tarde del viernes 1-10, en Cancilleria de Quito, se reúnen los Cancilleres de la compacta UNASUR para dar apoyo al Gobierno ecuatoriano. El Canciller Patiño con 5 puntos en la cabeza suministra un informe detallado y propone un encuentro con el Presidente Correa a las 19.00 en el Palacio de Carondelet. El encuentro se realiza con 10 cancilleres de UNASUR serios, silenciosos, cada uno dando su apoyo al gobierno democrático. Muy cerca de mis ojos, Correa define el asunto como intento de Golpe de Estado e intento de magnicidio. En medio de las palabras, traquetea, la lágrima se le introduce en el corazón al recordar que al salir del Hospital Policial un guardia le cede su chaleco antibalas, Correa sube al auto con el chaleco puesto, las ráfagas destrozan los vidrios, un balazo perfora el pulmón de aquel resguardo heroico que cae fulminado. Hay un descerebrado, otro hemipléjico, se lamenta el Presidente. A las 21.00 los Cancilleres se paran a abrazarlo, solidarios con el valiente Presidente Rafael Correa que frena al imperialismo, aumenta salarios, construye carreteras, expulsa a las bases yankees de territorio ecuatoriano, forja una reingeniería económica beneficiando a los más pobres, combate la deuda externa. Por otro lado, las calles citadinas y dirigentes indígenas lo acusan de soberbio. Es posible (ese carácter suyo de la costa guayaquileña a veces fastidia), pero no se escuchan acusaciones de corrupto y entreguista. La derecha troglodita ecuatoriana se

quiso aprovechar- a la mala- de un problema domestico generando casi una guerra civil. Los ángeles (humanos y espirituales) protegieron al Presidente Correa que quedó con 5 balazos en su auto y un puñal en el alma que lo sufrirá hasta el final de sus días.

miércoles, 6 de octubre de 2010

HUMOR RACISTA

Por: El Papirri

Los años 2006,2007 y 2008 sufrí bastante por este asunto de las expresiones racistas en las calles, en los medios, en los teatros, la mayoría de ellas referidas a “indio e mierda” y dirigidas al Presidente Evo. Se volvió triste para mí ir a dar conciertos en Santa Cruz, mientras esperaba la prueba de sonido en el hotel, prendía la tele y empezaban los insultos al colla e mierda, o sea a mí, que acababa de llegar a tocárselos, a divertirlos, a sensibilizarnos. En el boliche-era un buen lugar, digamos de clase media alta cruceña donde trabajé por 15 años dando recitales- empezaban a llegar los comensales, al verme blancon desplegaban la lengua reclamando que los indios de mierda se estaban entrando hasta la hacienda de papá. El taxista afirmaba-sin conocerme- que yo era de Tarija, que tenemoj que hacer otro paij puej y voltearlo al indio y mierda. Una vez no pude mas y le dije oiga porque Ud. no se mira al espejo con su cara de sirionó? Frenó en seco y me saco a empujones del auto con guitarringa y todo.

Otra vez fui contratado para tocar en medio de la función de Chaplin Show, una empresa de humor hecha por collas cochabambinos y orureños, prospera, en pleno Equipetrol. Antes de salir a escena me vino nauseas por los chistes come collas, donde el indio era una bestia, el colla un burro, las carcajadas salpicaban whisky importado como parte de un circo romano. Salí a escena de mal humor, sin éxito alguno. El asunto rebalsó cuando en otro boliche de trovadores un cruceño estiró la mano y me tapo la guitarra diciéndome que tenía que cantar Viva Santa Cruz, nuestro himno ¡ escupía sulfúrico. Le dije que yo solo sabía dos himnos, el de Bolivia y el de mi colegio, que no sabía tocar aquella canción compuesta por el orureño Gilberto Rojas. En el entretiempo el susodicho ingresó al camerino con varios alterados diciendo colla y mierda y que no me dejarían tocar si no interpretaba música cruceña. Las que más agredían eran sus bellas mujeres. Decidí retirarme al hotel y no volver a tocar en Santa Cruz hasta que los aires racistas y violentos dejaran de contaminar, o sea hasta hoy.

En el 2008 acepté una oferta laboral de la compañía de humor Tralala Show, cuatro meses de funciones con un solo día de descanso a la semana, tanda y noche y un excelente salario. Me dieron un sketch con una actriz que hacia de limonera potosina antes de que cantemos juntos la canción Bien le cascaremos. Al leer el guión me sentí mal, me acorde de mi comadre Cornelia Veramenti del Grupo Norte Potosí. Yo tenia que actuar del k’arita que la había embarazado- y por lo tanto violado- y decir como pues, como pues, yo no he sido. Entonces le dije a la directora que no haría ese papel solicitando otro guión. Inteligente, me desafió a que yo hiciera el guión, entonces vino mi primera experiencia creando un sketch interesante donde la limonera se expresaba de manera racista contra mi, llena de prejuicio gracioso y al final superábamos el entredicho pues la canción que le gustaba había sido compuesta por el blancon. La limonera era una excelente actriz, Marianela Molina Travesi. De lo que no pude librarme en esta gira fue del sentimiento de asfixia cuando desde bambalinas escuchaba como otra actriz decía que el Presidente Morales debería ser entrevistado en Animal Planet.

No es necesario vilipendiar a nadie para hacer reír. No es necesario humillar al prójimo para generar carcajadas. Llegó la hora de que varios humoristas bolivianos replanteen la cosa, se serenen y dejen de humillar a las abarcas, a la hoja de coca, a lo indígena. Será el fin del humor colonial ? No creo, son estancias perdurables. Este momento debería ser mas bien un desafío para que de manera creativa se traten de equilibrar los mensajes escénicos y desarrollar una comedia que nos refleje sin necesidad de avasallar al otro; reír con alegría genuina, con sorpresa de niños, con inteligencia y sutileza sin

necesidad de mierdear a nadie. Ni en la calle, ni en la radio, ni en el escenario. Si no, van a generar la respuesta del otro extremo con el humor anti-k’ara que me va hacer renegar de nuevo y yo solo quiero reír, che.

CON DON WALTER SOLON ROMERO

Por: El Papirri

Había ganado un examen de meritos para ser Director del Taller de Música de la UMSA, era abril de 1986.Ingreso por vez primera al solitario predio, abro un ropero y me caen a la cabeza tarkas, mohoceños y sicuris. Averiguo, pertenecían a la Orquesta de Instrumentos Nativos que había fundado Cergio Prudencio como parte de ese Taller en 1979, lo ubico, instauramos como primera actividad un Curso de Instrumentos Nativos que lo dicto con lucidez y que empezaría a restablecer el proyecto de la Orquesta suspendido por el golpe de García Meza. Las actividades del Taller de Música eran febriles, apuntaban a investigar, difundir y crear simultáneamente. Entonces, surge un curso de guión en canal 13 TVU, allí conozco a Iván Rodrigo, productor del canal quien me plantea musicalizar un Video sobre el mural que pintaba aquellos días Don Walter Solon Romero en el Salón de Honor de la UMSA, el video se llamaba Enigma de Fulgor con la actuación de David Mondacca y Norma Merlo. Acepto el reto.

A la sazón, voy a conocer al muralista quien me recibe en su estudio de la Av. Ecuador de La Paz, tan amable, humilde y respetuoso mostrándome magnificas obras que mandaría a Europa. En 1986 la democracia florecía pero se secaba rápidamente por el 21060, la corrupción mirista defraudaba, Don Walter- firme en su ideología- se atoraba por esto. Para imbuirme seguí al maestro unos días mientras pintaba el mural trepado en sus caballetes mágicos, con su mandil sopleteado de oleos. El mural era dramático, como la historia del país. Compuse la banda sonora con los primeros hervores de los instrumentos nativos en mi cabeza, decidiendo crear como final un huayño potosino de esperanza, homenaje al pintor también potosino. Entonces fui a la peña Naira y me introduje al camerino del grupo Norte Potosí quienes me miraron rarito, les explique el proyecto, grabe en cassete sus ensayos que motivaron el nacimiento de un sentido huayño: “La Esperanza esta prendida”. Antes de grabarlo en los tétricos estudios de Heriba los músicos vinieron con sus chalequitos multicolores de Llallagua a mi dpto a tomarme examen, cambiaron un par de notas, repasaron y grabamos de sopetón con la voz cristalina de la Cornelia Veramenti, los charangos metálicos del Ruben Porco y Pablito Veizaga. Recuerdo que el huayñito en sus primeras estrofas decía: cantaremos a la vida/aunque el patrón no lo quiera/ la esperanza esta prendida/nacen flores de las piedras/polleras infladas/jardines de mantas/lunas perfumadas /son las barricadas/.La música anunciaba el exitoso “Bien le cascaremos” de 1994.

Semanas después nos avisaron que habíamos ganado el entonces acreditado concurso de video Llama de Plata a la mejor banda sonora. Cuando me entregaron el trofeo de la llamita me acompañó Don Walter, mi padre había fallecido semanas antes .Entonces me acostumbre a visitarle en su estudio, a tomar café en jarro con marraqueta y quesito Kollana, a cambiar discos con el Waltico Junior- melómano asombroso- y apoyar con canciones a su esposa en las campañas por encontrar a un hijo desparecido en la dictadura de Banzer. Luego me fui al Japón y allí encontré a sus Quijotes en la Universidad de Kyushu. Nunca más lo abrace.

Ayer me topé con el Ivan Rodrigo en un moll, se había vuelto un quiteño gordito total, me saludó con las cejas. Mi alegría colisiono con su parquedad. Desde aquella época está por aquí, le pregunté sobre el video, dijo que le habían robado todos los videos de su casa. Y parece que sus recuerdos también. No quedamos en vernos. La verdad me interesa saber de la canción más que del video, que era bastante regular. Donde estará aquel huayño? Donde se quedan las canciones rezagadas? Con que derecho las olvidamos? Para que las hacemos si no se cantaran mas? Si no se alojaran en los

corazones de la gente ? Que ingratitud, che¡ mejor un día de estos iré por la Fundación Solon para preguntar si tienen aquel canto de esperanza. Y a rezar una oración a las cenizas de Don Walter, maestro sincero, caballero quijote, lucido anunciador de las nuevas épocas.

martes, 21 de septiembre de 2010

MIS 50 AÑOS

Por: El Papirri

Hice todo lo posible para no llegar. Me esforcé triturando hígado, tripas y cuore. Y ahora que llega mi cumple 50 me siento reluciente: por fin no tendré complejos por la panza que cargo, por las arrugas de higo, por las canas que brotan sin medida ni clemencia, por los dientes liwis, por los ojos nublados, por el trago que no acepto. Mi vida atravesó períodos esenciales. Los primeros cuatro años dicen que galoparon suaves en residencias diplomáticas hasta que la Revolución Nacional cayó. Con Barrientos llegaron 16 años de dictaduras, mi padre siempre perseguido me volvió especialista en termos y frazadas, los allanamientos hasta ahora pueblan mis pesadillas. A mi madre le fue germinando un cáncer funesto, concertista eximia que escribía a pulso las suites de Bach, el tumor le paralizo el brazo izquierdo. A mis trece años tocaba paradito a su lado supliendo la mano inflamada frente a cientos de alumnos de la Escuela de Folklore, ese dúo mantenía la casa. Con la muerte de Anita brotó un vacío espantoso, me agarre de las canciones de Sui generis y Silvio, de la lucha por la democracia, de mi barrio, del futbol y del trago. Luego García Meza nos “becó” a México, mi padre ya anciano no soporto el D.F y se quedo en Lima, con mi hermano tratamos de salir del hambre. Quise estudiar música y me aburrí en el tercer año. Por suerte nacieron mis primeras canciones de amor, desamor e ilusiones sociales. Al retornar del destierro me volví star provinciano de la nueva canción, tuve que trabajar en algunos oficios, funcionario de la universidad, docente del conservatorio, inaugurando un método de alfabetización musical en base a la música aymara que deje en medio camino. Grabe discos con ambición de principiante, siempre explotado por los sellos discográficos. Me case, fui feliz, aterrice en el Japón, volví solo a seguir haciendo canciones. Ya con 30 abriles en los ’90 conocí el éxito con el hit Bien le cascaremos que me llevo de cantina en cantina, de la televisión a la radio, hotel dulce hotel. Trate de generar identidad en las canciones y de plantear sorpresas en las músicas. Intente hacer espectáculos post modernos inaugurando lo plurinacional y la recuperación del habla aymara urbana: un chenk’o total. Me divorcie dedicándome más a las bartolas. Fui funcionario municipal cultural durante una década aprendiendo gestión cultural en la cancha, sin mamadas académicas. Compuse la mamada y me reí mucho. Estuve un año en el país del poder y caí de bruces al piso levantándome por octava vez como tigre herido gracias al barrio, la música y las cervezas. Soporte prejuicios. Alenté estigmas. Me enamore como foca, hice demasiado el amor concurrentemente. Con el digito cuatro fui padre biológico, conocí el mundo con la música, mi guitarra se escucho en Teatros de Londres, Tokio, Nueva York, Madrid, Washington, Zurich, PyonYang, Lima, Santiago, Montevideo, México, Río.

Por tanto lío, caí enfermo y ahora cumplo 50 otra vez en las oficinas de gestión cultural consiguiendo auspiciadores para artistas ajenos. Recuperé la fe en los cambios sociales, recuperé la fe en el amor casandome de nuevo, recuperé la fe. A veces toco la guitarra y me riñen por que soy funcionario. Tengo cuatro amigos y dos amigas que son mis ex amantes. La gente me recuerda con simpatía, otros no tanto. No tengo enemigos, tengo envidiosos. En estos cincuenta años, medio siglo de milagros, agradezco haber tenido un barrio, una ciudad vital, ideales que no se venden, la herencia musical de mi madre y el legado de dignidad de mi papa. Pido disculpas a los que no se acuerdan de mí porque yo tampoco me acuerdo de ellos. No le debo nada a nadie. Tal vez descargos a ex amores que no comprendí, mujeres inteligentes que soportaron mi perpetua inmadurez. Espero cumplir mínimo una década más porque después de esto no hay nada, solo el recuerdo de algunos cuando están medio yucas. Quiero ver más el cielo, respirar

estrellas, tirarme al agua pelado, comer mandarinas frente al mar, embriagarme de Carolina. Un poco de aplausos no caen mal .Y cascarle esta bajada irreversible con decoro, como en aquella bicicleta de mi infancia radiante en el pasaje Guachalla de Sopocachi. Salud, Papirri¡ libertad, Manuel¡ Te felicito que no te hayas muerto y que tu corazón todavía renueve el derecho a la sorpresa y a la ternura en estos cuarentaydiez.

Kitu.18 de septiembre 2010
CON DON WALTER SOLON ROMERO

Por: El Papirri

Había ganado un examen de meritos para ser Director del Taller de Música de la UMSA, era abril de 1986.Ingreso por vez primera al solitario predio, abro un ropero y me caen a la cabeza tarkas, mohoceños y sicuris. Averiguo, pertenecían a la Orquesta de Instrumentos Nativos que había fundado Cergio Prudencio como parte de ese Taller en 1979, lo ubico, instauramos como primera actividad un Curso de Instrumentos Nativos que lo dicto con lucidez y que empezaría a restablecer el proyecto de la Orquesta suspendido por el golpe de García Meza. Las actividades del Taller de Música eran febriles, apuntaban a investigar, difundir y crear simultáneamente. Entonces, surge un curso de guión en canal 13 TVU, allí conozco a Iván Rodrigo, productor del canal quien me plantea musicalizar un Video sobre el mural que pintaba aquellos días Don Walter Solon Romero en el Salón de Honor de la UMSA, el video se llamaba Enigma de Fulgor con la actuación de David Mondacca y Norma Merlo. Acepto el reto.

A la sazón, voy a conocer al muralista quien me recibe en su estudio de la Av. Ecuador de La Paz, tan amable, humilde y respetuoso mostrándome magnificas obras que mandaría a Europa. En 1986 la democracia florecía pero se secaba rápidamente por el 21060, la corrupción mirista defraudaba, Don Walter- firme en su ideología- se atoraba por esto. Para imbuirme seguí al maestro unos días mientras pintaba el mural trepado en sus caballetes mágicos, con su mandil sopleteado de oleos. El mural era dramático, como la historia del país. Compuse la banda sonora con los primeros hervores de los instrumentos nativos en mi cabeza, decidiendo crear como final un huayño potosino de esperanza, homenaje al pintor también potosino. Entonces fui a la peña Naira y me introduje al camerino del grupo Norte Potosí quienes me miraron rarito, les explique el proyecto, grabe en cassete sus ensayos que motivaron el nacimiento de un sentido huayño: “La Esperanza esta prendida”. Antes de grabarlo en los tétricos estudios de Heriba los músicos vinieron con sus chalequitos multicolores de Llallagua a mi dpto a tomarme examen, cambiaron un par de notas, repasaron y grabamos de sopetón con la voz cristalina de la Cornelia Veramenti, los charangos metálicos del Ruben Porco y Pablito Veizaga. Recuerdo que el huayñito en sus primeras estrofas decía: cantaremos a la vida/aunque el patrón no lo quiera/ la esperanza esta prendida/nacen flores de las piedras/polleras infladas/jardines de mantas/lunas perfumadas /son las barricadas/.La música anunciaba el exitoso “Bien le cascaremos” de 1994.

Semanas después nos avisaron que habíamos ganado el entonces acreditado concurso de video Llama de Plata a la mejor banda sonora. Cuando me entregaron el trofeo de la llamita me acompañó Don Walter, mi padre había fallecido semanas antes .Entonces me acostumbre a visitarle en su estudio, a tomar café en jarro con marraqueta y quesito Kollana, a cambiar discos con el Waltico Junior- melómano asombroso- y apoyar con canciones a su esposa en las campañas por encontrar a un hijo desparecido en la dictadura de Banzer. Luego me fui al Japón y allí encontré a sus Quijotes en la Universidad de Kyushu. Nunca más lo abrace.

Ayer me topé con el Ivan Rodrigo en un moll, se había vuelto un quiteño gordito total, me saludó con las cejas. Mi alegría colisiono con su parquedad. Desde aquella época está por aquí, le pregunté sobre el video, dijo que le habían robado todos los videos de su casa. Y parece que sus recuerdos también. No quedamos en vernos. La verdad me interesa saber de la canción más que del video, que era bastante regular. Donde estará aquel huayño? Donde se quedan las canciones rezagadas? Con que derecho las olvidamos? Para que las hacemos si no se cantaran mas? Si no se alojaran en los

corazones de la gente ? Que ingratitud, che¡ mejor un día de estos iré por la Fundación Solon para preguntar si tienen aquel canto de esperanza. Y a rezar una oración a las cenizas de Don Walter, maestro sincero, caballero quijote, lucido anunciador de las nuevas épocas.

viernes, 10 de septiembre de 2010

EN LA FOCH

Por: El Papirri
La Foch es el territorio de la bohemia de Quito. Se llama así porque cruza el divertido territorio la avenida del Mariscal Foch, que quien será. Voy de mes en cuando, llevando visitas bolivianas y siempre me atiende Milton Melgar, un mesero mariquita que es un chiste. Hay que ir de 19:00 a 21:00 porque dan dos por uno. A partir de las 21.00 la cosa se pone pesada, colombianos volteadores y cubanos pro Miami vigilan como sacarte la cresta.
Una noche hemos ido con el Jorge Barron, ingeñero nacional, amigo de aaantes, del exilio mexicano garciamezista, quien llegó para un seminario. Nos sentamos, cuando emprende el informe de novedades me toca el hombro de la mesa de atrás un gordito de bigotes que dice: Ud. es el bien le cascaremos? Si…digo, tartamudo. La señora que le acompaña se para, Ayy, lo vimos actuar en Santa Cruz, en Tapecua… Siéntese un ratito, Donde toca en Quito? queremos ir a verlo, dice el señor, A mi me encanta esa canción suya de las rimas, dice la señora, Yo soy gerente de banco (me da su tarjeta), soy uruguayo, me gusta su guitarra, cualquier cosa… no se olvide, nos avisa donde toca. Despedida amable.
Vuelvo a la mesa, cuando el Barron quiere empezar novedades bolivianas aparece el Chiquitin, mi charanguista ecuatoriano, dos metros de estatura, chamarra eterna de cuero, bondad en los ojos, A los tiempos Papirri ¡se sienta y recordamos el concierto de meses atrás con Feliu. Silba y aparece el Feña, soberbio espécimen de la costa esmeraldeña, mulato medio rubio de 25 años con sonrisa plena, se sienta, le digo te voy a tomar examen delante del ingeñero, con una voz de fantasía canta mi canción La Guacataya de p a pa, todita, Carlos Vives en jovencito, le digo al ingeñero que se ríe. Milton se enamora del Feña.
De pronto llega un chop inesperado dedicado a mí, laaargo, la mesera de al lado señala: es del señor. Lo veo, parece un milico, me saluda con el vaso, le respondo, Milton sonríe, me pongo incomodo, le digo al Barron estamos rodeados nos iremos nomás, entonces el men se para, se acerca con su chop, casi lo hace caer, dice: Papirri hermano…me abraza, Soy Rubén Vargas, vengo de La Paz a un encuentro de colegios militares, hermano, donde vas a tocar? mis hijitas saben de memoria tus canciones. Salud¡ el gordito bancario dice, salud¡ el Feña y el Chiquitín, salud ¡el ingeñero Barron, salud¡ la Foch es nuestra, las estrellas sonríen, yo beso el vaso.
El militar continua, Ven Papirri te voy a presentar, estoy con unos colegas de Latinoamérica, me lleva a su mesa, El es de Venezuela, el es de Argentina y los dos son cadetes bolivianos. Uno de los cadetes dice, este es el Papirri?? Chazarreta, hermano, donde vas a tocar ?nos abrazamos…el argentino dice mirándome: Chazarreta te yyyamas? Si, le digo, mi madre era de Santiago del Estero. Yo soy santiagueño, se emociona, Mi abuelo es Andrés Chazarreta, le digo, No puede ser¡ abrazos… No sabia como arreglármelas para corresponder tanto cariño, los paceños se sacaban fotos conmigo, el santiagueño peor, el banquero me perseguía con su Black Berry, el Barron no lo podía creer y yo tampoco. Retorno pertinente a la mesa originaria, el Feña y el Chiquitín comentan: todito lo tenias preparado, no?.
Entonces, cual suegra digo son las 21.00, tengo que irme muchachos, Mejor vamos por unas chevas a mi hotel dice el ingeñero, No hermano, es una noche especial, vamos a mi dpto, les digo. Despedida cariñosa con el banquero y su señora que había sido cochala, los milicos oscilaban en los abrazos, el santiagueño pajlita pide una fotito más don Chazarreta. Entramos al taxi, por favor a mi depto le digo al maestro quiteño y como si fuera un cuento, un embrujo dice: si, amigo Papirri, yo le conozco a Ud. por la canción Hoy es domingo cantada por Emma Junaro, hoy es domingo hoy es domingo, entonaba el men ecuatoriano que nos deja eficaz en casa. Ya instalados el Feña canta la Guacataya con mi acompañamiento, el Chiquitin improvisa como Paco de la lucia, el Barron collamente todavía no lo puede creer. Considerando que era jueves y había laburo terminamos esa noche célebre de la Foch antes de las 12:00 pues yo me tornaba lánguidamente en la cenicienta de oficina actual. Si no me creen, pregúntenle al ingeñero Barron.

martes, 31 de agosto de 2010

SEIKO SAN

Por: El Papirri
Entonces empezaron a salir más contratos para tocar en diferentes puntos del Japón. Las tocadas en Osaka de los jueves incluían viajar en un barco con piso de tatami con cientos de japuchos durmiendo en el piso, como pijama party flotador, llegando directo a la prueba de sonido con cuatro nipones paraditos en sus camisas caribeñas prestos a tocar full bossa nova. Los viernes venían las tocadas en Honshu con Los Ubanquiacas (nadie sabia el significado del nombre), cinco japuchos inertes en sus ponchos de calcha con repertorio Jairas y Kajrkas, para lo cual tenia que cruzar por debajo del mar una hora en el shinkansen (tren bala) a 300 Km por hora. Una vez de chaqui me vino claustrofobia marítima, el corazón quería salirse, entonces apareció una pulcra azafata japonesa , Sumimasen, doozo, llevandome del brazo al vagón de los desmejorados donde varios gringos y gajines (extranjeros, bárbaros) veían placidamente en pantalla gigante imágenes de cascadas . Te daban un wiskicito con masaje de yapa hasta que la paranoia se desvaneciera.
El que conseguía las tocadas con esmero era mi alumno de guitarra Yotusgi san, melómano del folklore boliviano, líder de Los Ubanquiacas, técnico en cables telefónicos, comprador de guitarras carisimas, eximio luchador por sacar el ritmo de chacarera. Su amiga Seiko san, mi alumna de charango, había desaparecido un par de meses. Un día abrí la puerta y apareció una japonesa muy guapa con el alarido: Manueru san, jishashiburi des ne¡ (hace mucho tiempo…).No la reconocí. Seiko desu, dijo como gorrión triste. Casi me desmayo. Aquella dama feita se había tornado en un minon- nipón. Le habían abierto los ojos, puesto parpados y pestañas, insertado tabique, los labios eran carnosos, pulido los pómulos, tetas para una palma, ya no era rosquita, hasta nalgas para agarrarse tenia. Sugoy des¡ (increíble¡ le dije). Verla preparar tecito en su uniforme azul de oficina era un placer, recordé al maestro Cavour que meses antes en un concierto en Nagasaki me había dado la instrucción de averiguar si la tenían horizontal o vertical. Me atoré.
Seiko san contó que decidió aceptar un ofrecimiento de su oficina-era contadora de la oficina de migraciones o algo así - le descontaban 20 % de su salario al mes por 10 años para pagar aquella venerable transformación. Eso si, había que respetar el último decreto del parlamento nipón que ordenaba las medidas máximas de apertura de ojos pues la ola de cirugías plásticas estaba acabando con la identidad nashonal. Esta transformación mas su vocecita dulce en el karaoke habían logrado un pequeño asenso laboral. Estaba feliz. Y yo peor. Luego de la clase de charango, hizo aparecer un sake, brindamos y nos encontramos en un beso breve conmemorando aquellas frotadas por las calles de Fukuoka. A partir de allí se prolongaron nuestros encuentros, en el ensayo con Los Ubanquiacas, en desayunos calientes, en cenas de fideos populares. Una tarde me convidó a su casa para estar con Otoosan (nuestro padre) quien luego de beber tesito se fue. Ahí mismo le sacamos fuego a los tatamis, los gemidos –un poquito exagerada la dama-hicieron que venga el guardia del edificio. En confesión de alcoba susurró que bordeaba los treinta, que ya era tiempo de casarse, que hacia su maestría en contabilidad para obligatoriamente presentar sus papeles a una agencia matrimonial. La agencia se encargaba de escoger los curriculums y seleccionar al candidato con similar nivel académico y otras analogías. Un master con una master. Un enfermero con una enfermera. Y el amor? siempre ausente, sollozaba. Entonces, latiendo en su mirada de ardilla me dijo: Manuerua san, aishiteiru,(te quiero), Cocoro cara, jashimete des (desde el corazón, es la primera vez que siento algo así). Entonces me asusté y salí corriendo.
El problema fue que la declaración de amor con su vocecita de gorrión la hizo publica noches después en la mesa familiar con Otoosan y Yotsugi san lo que causo una hecatombe asiática, un tsunami ecuménico, se rompió for ever aquella armonía de pitufos. Otoosan en tono samurai vociferaba que éramos hermanos ¡ Yotusgi en tono katateca clamaba que yo era gajin¡ los gritos aceleraron mi retorno a Bolivia. Años después supe que Seiko se había casado con Yotsugi, hoy son una pareja japonesa standard con hijitos labrados en origami. Habría sido una estrategia femenina nippona? Tabun (talvez…).

IV SEMANA CULTURAL DE BOLIVIA EN ECUADOR.

Por: El Papirri
Que tal metal ¡ La IV Semana Cultural de Bolivia en Ecuador 2010 fue todo un éxito. El viernes 6 de agosto inauguramos la Semana en el prestigioso Centro Cultural Metropolitano de Quito, una Casona Museo enclavada en el corazón del Centro histórico quiteño muy difícil de ser concedida pero nuestros contactos municipales funcionaron. El Patio de la Casona estuvo repleto de público y periodistas. Como Los Masis llegaban en la tarde, pusimos tinkus y morenadas con el Ballet Inkary para animar el encuentro, que se extendió con la ofrenda Floral mística en plena Plaza Grande .El sábado 7/8 se dio el evento en la Plaza Santo Domingo del centro quiteño en un escenario excelente y sonido de lujo pues logramos insertar nuestra Semana Cultural en las Veladas Libertarias quiteñas y esto nos garantizo la infraestructura artística de primera .Los Masis llegaron con fuerza tocando ante 3.000 personas. El Domingo 8/8 fue especial por la Toma de Quito, convocamos al Ballet Sumag compuesto por 20 caporales con damas apetecibles, Ballet Kalpañan con 30 bailarines en una excelente Morenada, Ballet Inkary con 20 Tinkus enérgicos, en total 70 bailarines ecuatorianos con trajes originales del Gran Poder todos concentrados en la Plaza de Armas de Quito. De allí partieron a las 11:00 bailando, logramos una mini entrada folklórica con masivo publico en las aceras que terminó en el escenario gigantesco de la Plaza San Francisco donde Teresa Parodi y los Nocheros habían actuado la noche antes. Fue literal una toma cultural. Llegando al escenario los bailarines se unieron al Pujllay que Los Masis iniciaban con fuerza increíble. Luego vinieron las charangueadas de Villa Serrano, aquellos registros maravillosos de los charangos de Don Mauro Nuñez cautivando a los ecuatorianos, cuecas, bailecitos y el coro final de caporales y morenadas: una fiesta boliviana total. El lunes 9/8 nos fuimos con Los Masis y el Ballet Inkary a la ciudad de Riobamba, a 3 horas de Quito. La prefectura de Chimborazo- cuya capital es Riobamba- financiaba nuestra llegada que se desarrollo en el Centro Cultural de la Universidad, un paraninfo de 300 personas que quedó chico, se quedaron afuerita unas 200 personas. El sonido, muy regular. En este evento Los Masis me pidieron que les ayude con la segunda guitarra y le cascamos bien, me estrené de Masi con ponchito y todo. Al día siguiente 7 horas en Bus hacia Cuenca, una bella ciudad, hablan como chapacos, el evento auspiciado por la Alcaldía de Cuenca fue en el Teatro del Banco Central, a todo lujo, 600 butacas repletas. El jueves 12 vino el Concierto de Gala en el Teatro Sucre de Quito, el más importante de Ecuador, donde Los Masis expusieron al cuerpo diplomático y publico en general un programa completo de dos horas y media trozado en cuatro partes iniciando con música aymara (muy bien los k’antus, sicureadas, tarkeadas), luego una atractiva parte de músicas de Norte Potosí para seguir con el Pujllay, el viaje por Chuquisaca y las músicas actuales de todas las regiones del país donde el Ballet Kallpañan se lució. Los neo Masis rondan los 33 años y traen un espíritu lleno de energía, calidad y optimismo. Sólidas voces, buenas cuerdas, excelentes vientos, indumentaria original de tejidos precolombinos, charangos de anticuario, sumados a una actitud fuera de escenario impecable y llena de tecnología, al día siguiente estaban los eventos en you tube puestos por el Roby Sahonero digno heredero del Tata Roberto , director del Grupo y el mas entusiasta de los ocho al bailar. Nuestra despedida fue de glorias el viernes 13/8 con Bolivia le canta a Guayasamin, conciertazo en la Fundación Osvaldo Guayasamín con localidades completas, evento auspiciado por las Embajadas de el ALBA. Tres ciudades conquistadas, mas de 10.000 personas beneficiadas en los espectáculos gratuitos, hermanamiento boliviano-ecuatoriano en escenario, difusión eficiente, marca país consolidada, defensa de nuestro patrimonio artístico y cero de gastos para el estado boliviano, todo un combo de buenas noticias que confirma que el arte boliviano es lo mejor que tenemos. El esfuerzo artístico de Los Masis tuvo su cosecha en las ovaciones, autógrafos y cientos de fans que piden el retorno del grupo al Ecuador. Yo soy ahora un Masi más, con orgullo y honor. Bien che. Pa ques decir.

viernes, 6 de agosto de 2010

El Papirri y la autoestima nacional

Raúl Peñaranda U.

Como tantos otros miles de seguidores, yo soy un admirador del Papirri músico. Manuel Monroy no sólo es compositor sino que también es un virtuoso de la guitarra. Y uno de los más importantes renovadores de la música boliviana. Nos ha ayudado a comprender, conocer y amar a la ciudad de La Paz, sus personajes y sus tradiciones más que decenas de otros intelectuales, antropólogos o historiadores.

Si hay alguien que ha tratado de mejorar la autoestima de los paceños es este músico, hijo de una calificada concertista de guitarra y de un famoso político nacionalista. El, como nadie, nos ha dicho quiénes somos, cómo actuamos, quiénes son nuestros personajes entrañables y nuestra forma de pensar. Pero la ciudad –y el país – que nos muestra en sus composiciones, los hombres y mujeres que desfilan por sus piezas, las calles y montañas que acompañan sus acordes, no son, ni mucho menos, perfectos. El Papirri, y nosotros, amamos a La Paz y al país, pero también somos concientes de sus defectos, de sus problemas, de sus vicios. No es idílico el mundo que nos muestra el arte de este compositor, y por eso mismo es más entrañable, más original, más único. Más realista. Nos sentimos perfectamente reflejados en las canciones del Papirri porque justamente nos muestran la confusión, el mestizaje, la riqueza y el abigarramiento de la sociedad paceña y boliviana. No somos eso ni aquello. Tampoco esto o lo otro. Somos todo eso juntos, desde la Alasita hasta el K’encha Teran, pasando por la cabeza de Zepita y llegando a la marihuana, perdón, la huacataya. Y ni qué hablar de la metafísica popular, cada vez más poblada y más fibrosa. “¿De verdad me estás mintiendo”? es especialmente hermosa. Se la regaló Lorgio Vaca al Papirri en un viaje y el Papirri nos la entrega a todos. Es que así hablamos. Y así somos.

El Papirri pasará a la posteridad, por eso, como un renovador de la música y, también, como un adelantado, como un pionero en estos intentos de que los bolivianos nos queramos más cómo somos, que admitamos más nuestros defectos, que auscultemos más nuestros temores. Los cambios políticos sucedidos en la última década han ayudado a que las clases altas salgan de su burbuja y conozcan y reconozcan a un país que miraban como si fuera sólo una postal, que veían desde la distancia de los álbumes de

fotos. Una vez rota esa burbuja, y amenazados por una sociedad más compleja, más pensante, más activa y a veces más ininteligible de lo que habían imaginado, podemos aspirar a una mayor integración, a un más profundo conocimiento del otro. El Papirri nos hablaba hace años de esas complejidades, con más simplicidad, y a la vez con más profundidad, de lo que muchos de nosotros nos imaginábamos. Y con más humor e ironía que cualquiera de esta generación.

Pero hete aquí que el Papirri no era solamente cantautor. “Columnista también habiá sabido ser” diríamos copiando su estilo paceñísimo. “Les voa contar”.

Si ser un músico de quilates como es el Papirri, que ha compartido escenarios en el mundo con Alfredo Zitarrosa, Fito Páez, Silvio Rodríguez y Mercedes Sosa, entre otros, ya es bastante inusual, lo es aún más ser también un extraordinario columnista.

Vengo siguiendo las columnas del Papirri desde hace muchos años. Primero las leía en La Prensa, que fue el primer diario en tener la inteligencia y buen tino de acogerlas. Luego las disfruté (y publiqué) en La Época. Ahora las sigo disfrutando en Página Siete.

¿Por qué Manuel Monroy Chazarreta es uno de los más exitosos columnistas bolivianos? Varias características de su estilo explican aquello. Muchas de ésas son infrecuentes en el panorama periodístico boliviano.

A lo largo de estos años he comprobado que el Papirri se mantiene fiel a sí mismo y a su estilo. Estas son las características de su trabajo que lo hacen exitoso:

Es cronista. El Papirri escribe en primera persona; al igual que en sus canciones, cuenta, como un cronista, los sucesos y anécdotas de su vida y a través de ellos la vida de la ciudad, primero, y del país. Al leer los textos, el lector sigue al columnista en sus viajes, sus desventuras, sus dificultades, sus amoríos y se deja llevar, casi hipnotizado, por el narrador. En esto, Manuel Monroy utiliza las mismas técnicas que ya son famosas en él en sus composiciones musicales.

Es auténtico. Es auténtico o, lo que es lo mismo, suena auténtico. Por más extraordinaria que sea la historia, el lector se deja llevar, cae en las redes del autor

porque le cree. Y esa credibilidad, o verosimilitud, más bien, se logra con los rasgos autocríticos, con los detalles íntimos, con la sinceridad con la que el autor escribe y nos describe lo que vive y ve. En algunas llega al extremo de la franqueza, como en aquella columna en la que nos habla del hijo suyo que nunca nació (no incluida en esta compilación). ¿Qué más prueba de autenticidad que gritarle al mundo ese dolor?

Tiene maestría en el lenguaje. Sus columnas son casi cinematográficas en el sentido que la descripción es como una cámara que nos muestra lo que el autor ve. El Papirri logra este rasgo muy bien, usando dos técnicas difíciles de manejar: escribir en presente y colocar dos o más situaciones simultáneamente. Cuando está en la flota yendo a Oruro, por ejemplo, logra desentenderse de su entorno gracias a escuchar a Matilde Cazasola. Viene y va entre las letras de la Matilde y sus vecinos de asiento.

Usa el elemento sorpresa. En todos los textos está presente la sorpresa, que se produce tanto por la anécdota en sí (en vez de viajar a Sucre en avión se va a Madrid, por ejemplo), tanto por la forma de narrar, de ofrecer un cierre. En esa misma columna termina diciendo: “Mientras jugamos cacho en Madrid les cuento que sólo quería ir a tocar Sucre. Harto se ríen esperando la devolushón”. En varias de sus canciones se ve el mismo efecto.

Usa el humor. Para el novelista boliviano Adolfo Cárdenas no hay virtud más difícil de lograr, y más importante, que la ironía y el sarcasmo, pero siempre que éste dirigidos también (o sobre todo) hacia uno mismo. Cárdenas dice que sólo los inteligentes pueden ser sutilmente irónicos. Reírse de sí mismo. Qué difícil. El Papirri lo hace, se ríe de él mismo y a la vez se mofa de los otros, del resto, pero con cuidado, con sabiduría. Como la pobre señora que les da sopas de marihuana a sus huéspedes pensando que les daba huacataya.

Usa la autocrítica y apela a la autoestima. Sus columnas muestran los innumerables problemas a los que nos vemos enfrentados los paceños. Es una crítica y una autocrítica a lo que somos. Pero también, paradójicamente, nos dice que todos esos problemas no son definitivos, insalvables. Se enfrenta a unos bloqueadores, una vez, pero luego éstos ayudan a una parturienta. Así, al desdramatizar nuestras fallas, nos mejora la autoestima. La “Metafísica popular” es el máximo ejemplo de autocrítica a la forma de hablar –y de pensar– de los collas pero también de conocernos y querernos como somos.

¿De dónde sale la creatividad? ¿De dónde vienen las metáforas? ¿Dónde nacen los juegos de palabras? Seguramente estos rasgos se trabajan, se moldean, se mejoran, se construyen con el tiempo y el esfuerzo. Pero también es porque, probablemente, se nace con esos atributos. Ya hemos dicho que su madre era una importante concertista. Y está claro que en las venas de su familia, empezando por sus lúcidos primos escritores Ramón y Enrique Rocha Monroy, corre la creatividad.

Raúl Peñaranda U. es periodista. Dirige el diario Página Siete.

viernes, 30 de julio de 2010

CULTURA DE BOLIVIA EN EL ECUADOR

Por: El Papirri

En mayo nos llegó la instrucción de difundir por estas tierras el Evento Mundial de Caporales convocado por Napoleon Gomez, ese extraordinario personaje que le encanta batir récords guinness con nuestro folklore. Acá, en Quito, el Jefe de misión no solo aceptó difundir el evento sino que me instruyó producirlo y coordinarlo para el domingo 18 de julio de 2010, simultáneo a 20 ciudades del mundo. Entonces me dije: con quienes ? Era un evento para residentes y migrantes bolivianos, en Quito solo hay señoras bolivianas con nietos ecuatorianos y algunos artistas pintores. Tomé contacto con el Ballet Sumag, una agrupación ecuatoriana de danza que baila caporales cuando llegan acá los Kjarkas, Tupay, etc. Las guapas ecuatorianas gentilmente nos conectaron con dos Ballets más, llamados Kallpañan e Inkary. Fue así que todo mayo y junio, los días lunes de 15:00 a 16:00 nos reunimos para producir el evento. Reinventamos una convocatoria para Ecuador, creamos el comité organizador del Evento compuesto por Sandy Soria, Directora del Ballet Sumag, Eduardo Salazar Director de Kallpañan y Jorge Chikaiza, Director del Ballet Inkary quienes con una militancia impresionante lograron convocar a doce ballets ecuatorianos¡ El resultado fue una fiesta cultural impresionante en pleno centro Histórico de Quito, en la Plaza del Teatro, con 200 caporales ecuatorianos mostrando sus mini polleras, dando los brincos juveniles y sobre todo reconociendo el origen de la danza. Lograr el permiso para la Entrada de cinco cuadras desde la Basílica hasta la Plaza fue todo un drama, por las altas restricciones del Municipio de Quito en el casco histórico. Lo conseguimos gracias al apoyo de nuestros aliados: la Prefectura de Pichincha que financió un escenario monumental y carpas para los camerinos, el Parlamento Andino que nos cooperó con afiches, 200 refrigerios, filmación del evento y , por supuesto , el propio Municipio de Quito que además nos apoyó con volantes.
Como aquí no hay bandas que interpreten nuestra música, contratamos tres camionetas con parlantes para darle duro a la música del desfile, encabezado por nuestro Embajador con un banner de 5 metros por 2 que decía: “Evento Mundial de Caporales 100% boliviano”, inmediatamente detrás se iniciaban tres bloques cada uno de cuatro ballets ecuatorianos danzando con ímpetu y gracia.
Este evento fue de doble reivindicación. Por un lado cumplir con el objetivo de sentar soberanía boliviana con la danza, tan plagiada en el continente .Y por otro lado aclarar de una vez por todas que el caporal es un género artístico y la saya es otro completamente diferente. La confusión mundial la consiguieron los propios grupos de música folklórica comercial boliviana desde la década del ’80.Creemos que se cumplieron los dos objetivos de manera contundente.
Saliendo de este escándalo de multitudes, ahora se nos viene la Semana Cultural de Bolivia en Ecuador 2010 de la cual también soy coordinador. En mayo empezamos con el lobby para lograr aliados y auspiciadores en vista de que el Ministerio de Culturas de Bolivia no nos pudo apoyar. Logramos 20 aliados, de los cuales destacamos al Ministerio de Cultura de Ecuador que nos apoya con 8 pasajes aéreos para el Grupo Los Masis quienes traen un programa musical sumamente interesante. La Fundación del Teatro Sucre apoya con el alojamiento y la alimentación del Grupo, la Corporación Andina de Fomento solventa los honorarios simbólicos, las alcaldías de Quito, Cuenca y Riobamaba cubren los escenarios gigantescos en las Plazas de Ecuador, todo un rompecabezas de solidaridad con Bolivia. Los tres Ballets organizadores de los caporales se unen a la Semana Cultural de Bolivia en Ecuador que se inicia el 6 de agosto con una conferencia de prensa en el fastuoso Centro Cultural Metropolitano de Quito y la posterior ofrenda floral en la Plaza Principal. El sábado 7 gran concierto en la Velada quiteña de Plaza Santo Domingo, el domingo 8 la denominada Toma de Quito donde 60 bailarines ecuatorianos de Tinku, caporal y morenada acompañaran a Los Masis en la Plaza San Francisco. El lunes 9 de agosto será el concierto en la ciudad de Riobamba, el martes 10 en la ciudad de Cuenca, el Jueves 12 de agosto el concierto de Gala en el Gran Teatro Sucre de Quito para despedir con “Bolivia le canta a Guayasamin” en la Fundación del maestro Oswaldo Guayasamin. En septiembre, se viene el Ciclo de Cine de Bolivia en la Cinemateca Nacional de Ecuador del cual también soy coordinador .Esto para que vean que no me estoy rascando .Ni tocar puedo. Aunque el domingo 1o de agosto actúo con el uruguayo Leo Masliah en el Festival Internacional de Cantautores en Quito. Esito seria la merecida auto propagandita. Van a disculpar.

OTOSAN Y SEIKO SAN

Por: El Papirri
Aquella pareja de la crónica el Giri retornó a casa con pequeños omiagis, caramelos en chino, algas secas, sopitas rápidas. El señor tenía las cejas habitadas, los ojitos desgarrados, la peladita resplandeciente y una sonrisa siempre benévola. Era pequeño, gordito y rápido, se apropió de la cocina y empezó a cocinar una de las sopitas, cham po, repetía, oishi desu (rico es), cham po, explicaba de nuevo cual muñequito duracell. La dama que le acompañaba resultó ser su hija, de nombre Seiko, como el reloj. Delgadita, tímida, se creía adolescente, ocultaba su rostro en un jopo negro y trataba de comunicarse con sonrisa tornasol agachándose, siempre. Ella sirvió la sopa, sentados en el piso comimos y sorbimos aquel cham po, una panetela de fideos gruesos nipones. Borivia no ongaku daizuki desu, decía Seiko san indicando en agudo que la música de Bolivia le gustaba. Yo ponía unos cassettes de Cavour, de Los Jairas, ella aplaudía como muñequita geisha. Watashi wa otoosan desu, dijo el caballero en samurai, Ima kara Manueru san no otoosan desu, repitió con una lagrimita en el ojo. Ohhh, arigatooo, le dije, emocionado, pues le entendí mas por el sentimiento que él iba a ser mi padre desde hoy.
De apellido Tanaka, mi padre japonés (Otoosan) se tornó realmente trascendental en aquellas soledades asiáticas. Llegaba de mañana siempre resuelto en su autito blanco, yo lo veía parkear y desde el balcón del tercer piso le gritaba Otoosan¡ con alegría genuina. Nos saludábamos en reverencias y ahí nomás esparcía en la mesita los caramelos, las algas secas, la sopa cham po y unos refrescos nipones de limón. Entonces empezaba la practica diaria de japonés mezclando señas y gestos, se reía mucho de aquellas lecciones, sacudía su pancita cual osito panda, luego decía desde su lunar de la frente ikimashoo¡ y nos íbamos en el auto a comer el célebre cham po en un moll gigantesco. Al punto me retornaba como buen padre.
Un día de esos apareció Seiko san con un charango y un ñato a su lado que traía un LP cuya tapa indicaba BOLIVIA DE COLECCIÓN. El tipo al verme señaló el LP, dijo tajante anata wa deska? (eres tu ?) señalando mi nombre que estaba al final del listado del LP junto a los Kjarjas, Zulma Yugar, Savia Andina. Era una colección de Lo mejor de Bolivia según Discolandia y figuraba mi canción Hoy es Domingo. Le dije jai, o sea si, el tipo se arrodilló inesperadamente apretando mis zapatos y gritó sensei desu¡ (es un maestro) .Levantarlo del piso fue un problema, era un japucho digito tres de 1.80, musculoso y aparatoso. Entonces ingresaron al departamento. Seiko san sacó su charango, me lo entregó para que lo afinara, Yotuzugi san- así se llamaban el men- saco una guitarra acústica carísima de marca Takamine, tocamos sonseras, lugares comunes del folklore andino. Ellos se regocijaban al máximo. Yotusgi san se volvió mi alumno de guitarra, Seiko san mi alumna de charango, a veces venían juntos, otras separados, me pagaban bien. Un día de esos llegaron con la noticia de que yo debía tocar en Kitakyshu, población a dos horas de Fukuoka donde transcurre este relato. Manueru san no conceto desu, dijo, ichi pato dake (solo una parte) jokano pato wa watashitachi no grup jikimasu, dijo (la otra parte tocaremos con nuestro grupo). Otoosan me llevó a aquella ciudad en su auto blanco, era mi primer concierto en un teatro, estaba lleno, me invitaron saque en el camerino, entré con potencia, el público calido pedía ancore, ancore. Esa noche dormimos en fila en la casa de uno de los del grupo de Yotsugi , un maestro de Ken Do que tocaba zampoña, el grupo se llamaba Los Ubanquiacas nunca supe porqué. Dormimos sobre tatamis, en colchonetas precisas, con futon galán y almohadita cual adobe de algodón. Los ronquidos nipones eran notables. Al día siguiente Otoosan me devolvió y me entregó un sorpresivo sobre con 10.000 yenes, algo así como 500 dólares y otros sobres finos de seda con propinas radiantes y muchos ramos de flores. Entonces empezaron a salir mas actuaciones, unas veces viajaba con Otoosan, otras con Yotsugi san, el viaje a Nagasaki fue particularmente interesante, conocí el Museo de las Bomba atómica, pavoroso. Otoosan no podía ver las fotos de terror, había nacido cerca de allí, luego me contó desgarrado que sus padres lo habían mandado a comprar harina a Fukuoka el día que explotó la bomba, tenia 15 años, toda su familia fue arrasada… se salvó de milagro. Desde aquel día, se levantaba a las 5 de la mañana a tirarse baldes de agua helada agradeciendo a los dioses que lo salvaron. En el invierno, a 10 grados bajo cero, era de verlo en ese acto de inmolación a sus 65 años. Otoosan fue realmente mi padre, siempre dispuesto, bondadoso, sonriente. Conocimos bellos lugares en su autito blanco. Yotsugi san se esforzaba por tocar chacarera sin éxito, se despedía en las noches luego de su clase con un gambarimasu¡ (me esforzaré).Mientras, Seiko san me obligaba a estudiar piecitas de Cavour en el charango ,ahí la veías en su faldita escocesa sentada en el piso con el charanguito de armadiro, mostrando la ve de su calzoncito de seda que sugería una línea húmeda. El error fue antojarme de aquella fruta vedada con serias consecuencias que algún día relataré.
La única vez que viajé por el Japón en avión fue por invitación de los residentes bolivianos en Tokio para presentar mis canciones. Cuando el taxi ingresó al aeropuerto, el cobrador de la tasa portuaria era nada menos que mi Otoosan ¡Marcó el ticket , nos vimos en ráfaga, se ruborizó saludándome, serio, con su gorrita de boletero. Como si no me conociera, este mi padre japonés.

Quito, Julio 2010.

martes, 13 de julio de 2010

COMPRIMIDO EN MP3

Por: El Papirri
Era un sábado esbelto, Quito fluía en aire tibio, caminábamos como adolescentes de la mano por el parque del Ejido corazón (o hígado? ) del centro histórico. Entonces me topé con un puestito de CD’s piratas, me llamo la atención pues tenia la particularidad de ofrecer en formato DVD (¡) cientos de canciones todas apretujadas en ediciones especiales. Fui al detalle leyendo: Roberto Goyeneche 632 canciones, Adriana Varela 333 canciones, Joaquín Sabina 556 canciones, Chico Buarque 890 canciones, Piazzolla 1.221 canciones. Me entusiasmó el buen gusto preguntando si se trataba de imagen o qué, respondió familiarmente Don German, quiteño peladito de 58 años, la ceniza del cigarrillo haciendo equilibrio, barba en incertidumbre, voz de ex radialista. Amable en la explicación me mostró un catalogo sorprendente indicando que en DVD entraban más canciones y con mejor resolución de audio. Las dudas continuaban, la ignorancia vislumbraba. Entonces, abrió una puertita minúscula en su espalda y pidió le acompañe a un túnel de piedras, Las casas de por aquí tenían calabozo, dijo. Ingresamos a lo que decía ser su oficina, un escritorio mugroso lleno de papeles y cartulinas con un computador de una tera (¡),ser vivo parpadeante, triturador de canciones. Don German me enseño pacientemente como vaciar las canciones de DVD a CD de audio y realizar propias compilaciones.
De pronto, miré al piso y encontré mi propia cara en una tapa a punto de cerrarse, Tengo su música, la bajé del Internet, yo conozco su canción Hoy es Domingo desde 1986, la descubrí en el cassete “Si de amor se trata” de Emma Junaro grabado en Uruguay, dijo, erudito. Me quede cojudo. Continuó: luego lo vi tocar en el Teatro Nacional acá en Quito en octubre y ahí me anime a sacar esta edición, 4 disquitos nomás he vendido, me dijo riendo e inaugurando un k’asa ventana causado por el cigarro. Entonces vi la tapa, decía: El Papirri, 139 canciones MP3 en CD. Explicó que mi producción cancionistica completa entraba en un CD de audio nomás, en la misma categoría y a precio de 2 dólares se encontraba la obra completa de Frank Delgado, de Carlos Varela, de Gabino Palomares, todos rezagados en CD de audio. Más allá, los poderosos Paquito de Rivera, Chucho Valdez, Los Kajrkas, Gonzalo Rubalcaba, Tupay mostraban sus sendas compilaciones en DVD de más de 300 canciones con mejor calidad de tapita y a 5 dólares. Decidí comprarle 10 colecciones en DVD, 4 en cd de audio y 4 disquitos míos. Al salir a la luz, pude ver la contratapa que recordaba una foto en algún callejón paceño realizada por mi amigo Ernesto Alcazar, con letritas pequeñas se precisaba toda mi discografía: 1983- Hasta Ahurita, 1990- Cuentacantos, 1994- Bien le cascaremos, 1996 -Que tal metal, 2002- Cara conocida, 2002- Full Guitarra, 2006 -El Papirri En Vivo, 2007 -El Papirri For Export, 2009- Helado Propicio. Impresionante: 30 años de canciones apretadas en un CD.
Llegando a casa ingresé el CD a la compu, yo sospechaba que tenía unas 100 canciones grabadas, entonces descubrí la mentirita de las 139 canciones por las versiones repetidas, Alasita por ejemplo en 3 versiones. Volví a escuchar Señora Gorda (1983) con el Oscar García en cuatro, Nico Suarez en piano y Rene Saavedra en contrabajo. Que tiempos aquellos ¡ La necrológica, La Cantata a la mala pata, todas se presentaba por orden alfabético. Que canción iniciaba el CD de marras? 100 años del Tigre, porque el numeral es antes de la a, según me explico Don German cuando me visitó con su catalogo de nuevo. Estoy escuchando la Villa Obrera (1981), la había olvidado, toca la zampoña Alex Sanchez, que será de él ? La batería el Charlie Barrionuevo, desaparecido en USA. Hay una que se llama La comparación que francamente la había postergado en la memoria, la Imilla Burguesa sonó trayendo sus recuerdos, la voz de uno de mis primeros amores cantando la canción Donde, la voz de Jenny Cárdenas en La Sonrisa. El asunto me emocionó en vez de indignarme.
Don German vino ayer y me trajo la obra de Path Metheny en DVD con 651 canciones. Y de regalo Mercedes Sosa en DVD con 772 canciones, Esto por permitirme la “edición” de su música, dijo. Lo llame a mi amigo Tilo, músico que arregla bicicletas, quien lo trajo al Dr. Logacho, el revistero del Ejido para ch’allar con un canelazo el CD El papirri en MP3 made in Ecuador. Así nomás es la cosa de la tecnología y de la piratería. Comprar un CD original es hoy un acto de nostalgia, valentía-por el precio- y apasionamiento, un placer de los pocos que quieren disfrutar el diseño, apoyar el lanzamiento, leer las letritas, analizar la ficha técnica, soñar con buen audio y demás vainas que a Don German le hacen reír grave.

LA CABEZA DE ZEPITA

Por: El Papirri

“Sentada en la oreja de la cabeza de Zepita /esta la Margarita aspirando Tanner/ candidato en la polera, sopleteada de cebollas/ 15 años en las pecas y su ombligo vocaliza 5 meses”, así inicia la canción mía- de las mejores- dedicada al icono urbano de mi ciudad de La Paz. En aquella intensa década del ’90, desde la Casa de la Cultura paceña, observaba transcurrir todo el linaje vital, todo el impulso de mi ciudad en la Plaza de los Héroes y en el latido mítico de la Pérez Velasco. El corazón paceño, así de grande, pulsaba vigoroso sus hilos de solidaridad en aquel territorio trascendente. Allí nos encontrábamos, nos descifrábamos. Era de ver a los aymaras urbanos lustrándose los cachos vía cajón celeste, k’este. Pobres, dignos, esperaban, miraban siempre desde aquella alturita, ellos eran los héroes de la Plaza. La Pérez lograba que La Paz siempre esté de navidad. La Cabeza de Zepita nos congregaba, volteaba gobiernos, los mártires alimentaban a las apachetas de la escultura de Ted Carrasco, erigida como centro capital, como taypi paceño. A partir de allí se levantaba la intensa visión del casco histórico desde San Francisco para atrás, con sus adoquines de lomo de ballena, brillando. Era de verse los colores del pasaje floreciente, los coleccionistas de libros históricos pagineanado, Nos vemos en la Pérez¡ señalábamos felices rebalsando salteñas. En las noches, se encendía aquella festividad imperecedera, las caseras de sucumbe hacían pasar el frío, los anticuchos afeitaban las estrellas. En las mañanas, los ex combatientes ponían y sacaban gabinetes, los lustras descansaban jugando un partidito, el pajpacu de la esquina vendía rata calva sin amebas, los choros te invitaban chicle.
De pronto llegó la violación del espacio, la amputación del imaginario, la apropiación indebida, transformaron- a la fuerza- el corazón paceño en hígado, en bilis, en orines. Ahora se quejan que la Cabeza de Zepita se volvió mingitorio siendo que el propio gobierno edil generó esto. Construyen-con nuestra plata- un bloque de cemento al mal gusto, una especie de mercado con textura de Terminal, un remedo de market que quebranta el centro histórico de La Paz. Y todavía declaran que el monumento de Carrasco infringía el paisaje urbano ¡
Me queda admirar aun mas a esta ciudad de Quito que creó un FONSAL (Fondo de Salvamento) que resguarda su casco histórico de los disparates de algún alcalde de turno, recreando su memoria de manera respetuosa, restaurándola e interviniéndola con amor y consenso. Si esta “intervención” se realizaba en Quito, las autoridades ediles autoras serian rigurosamente castigadas por terrorismo cultural al centro histórico. Siento que la ahora denominada Plaza Mayor paceña es el símbolo de un pensamiento colonial depredador, discriminador, deshumano. Antes-está comprobado- aquella horrible pasarela liquidó nada menos que a la Pérez Velasco volviéndola un viaducto solitario, gris y peligroso.
Lo cierto es que hoy arrasan con el corazón de La Paz. El patrimonio tangible de la ciudad esta siendo quebrantado con daños irreversibles, con topadoras ignorantes, la obra de Ted Carrasco exiliada a un barrio shik, la venerable Plaza de los Héroes -territorio solemne paceño- vuelta ceniza por técnicos de fruslería. Y lo peor, el patrimonio intangible ha sido cercenado, la visión del icono, el vigor del taypi, la celebración del artista callejero, la ilusión del desempleado, la valentía del mártir aymara en la guerra del gas, la alegría del mocochinchi, las caseras y su linaza esparcida, las flores espontáneas, los hermanos lustras de ALPEVE (Asociación de lustra calzados de la Pérez Velasco) generando su milagro, alimentando a miles de niños y adolescentes trabajadores, toditos perseguidos, arrasados por una visión edil pseudo modernista que invoca al cadalso ultramarino, que insta a regar a los mas pobres con agua helada para retirarlos de la Plaza Mayor. Y los paceños dicen algo? Parece que no, aceptaron en su rutina tensa la trasgresión de la memoria .O huyeron al sur…
Algunos soñamos con retornar la Cabeza de Zepita a su venerable lugar en un acto de reparación. Y resucitar la Pérez .Mientras, la gestión municipal sigue devastando sin miedo nuestra heredad con la complicidad del colegio de arquitectos, con el silencio de un comité cívico paceño de ga gas cuyo presidente creo es de Oruro. Pronto pondrán ascensor en Las Velas, moll en el Tambo Quirquincha, pavimentaran la Jaén, parkeo en el Illimani, creando -eso si- mas puestos policiales sin motivo como el de la Plaza Abaroa que solo trajo desolación. Pero no hay que amargarse, algún día La Paz rugirá de nuevo, reciclara esta miseria con el verdadero sentido común del paceño caminador de sus subidas. Pronto, La Paz volverá a recuperar su ajayu superando el abuso de los que solo la conocen desde sus autos oficiales. Mientras tanto, hay que pararlos y prevenir más transgresiones urbanas, convocar de emergencia a los concejales no oficialistas ( los hay?) para frenar el exterminio .Aunque sea a la barra ultra sur del Tigre hay que convocar para que protejan de tanta inauguración de pacotilla nuestra alma inclusiva, nuestra vida fraterna, nuestra La Paz del trato amable, la del artesano creativo, la del comerciante respetuoso, La Paz humana, alegre y con memoria. Me han hecho renegar estos giles. Truenen laderas: hasta cuando pues ¡

Fiestas Julianas 2010.

lunes, 7 de junio de 2010

SABINA PASO POR MAYO

Desde el ombligo del mundo
SABINA PASO POR MAYO
Por: El Papirri

En Febrero nos enteramos que llegaba Joaquín Sabina, en marzo compramos la entrada, en abril el ultimo CD “Vinagre y Rosas” (piratita nomás), en mayo por fin¡ marchamos radiantes al concierto en el Coliseo Rumiñahui de Quito. Ávidos, guiados por los espíritus sabinescos llegamos bien, el taxi en la puerta, la fila infinita de ingreso la cambiamos por una colita breve, veloz, grata. Nos revisaron hasta el posadero y ya estábamos bien colocaditos. El escenario -de frente, a unos cien metros -exponía una escenografía que parecía de la época del Teatro de Oro de Raúl Salmón. Se trataba de un paisaje urbano con tubos floreciendo en aguas servidas. Luego el diseño y ejecución de luces nos darían la lección: aquel cartón obvio, dibujo muerto, se transfiguraba en anocheceres eróticos, en amaneceres de glorioso ch’aqui, mientras “la luna se volvía una daga manchada de alquitrán”.
Poco a poco nacía del vientre de aquel deslucido coliseo un demiurgo emocionado, vibrante, un monstruo solidario de 25.000 seres excitados. El joven trío telonero hizo lo que tenia que hacer: probar cables y aburrirnos. Entonces apareció dando brincos en su terno rockabilly un sesentón eufórico con sombrero de paja, saludando radiante, era Panchito Varona, parceiro de Sabina en músicas históricas, ahora de bajista. Fueron completando la banda un marinero acordeonista hecho al sexi, una corista guapa-madura voz de aguardiente, el veterano y sorprendente músico multiinstrumentista García de Diego, un baterista preciso encerrado en su jaula de cristal y el barbudito guitarrista del costado: cinco músicos en escena que sonaban como si fueran docena. Tres ingenieros de sonido, dos técnicos de luces más tres cañoneros completaban el equipazo. Entonces apareció el capitán, pasito de pantera rosa, Joaquín flaquito, Sabina macetero, añejo marinero con polera de interrogación, saquito negro y sombrero de chaplin, con jean café pegado a los huesos de pirata. Empezó con las ultimas canciones (uy cara) y dijo, vibrante:”no me pidas que muera por ti /lo que queda de mi se subasta a la mejor postora /como un parco motín en el barco ruin de la aurora”. A la sazón, vino la dedicada a Chavela, rugió el demiurgo, Sabina dijo:”Chavela cumple 91 años, nos unen tres cosas: los dos somos borrachos, somos mujeriegos y estamos viejos”… ahogados coreamos quien pudiera reír como llora Chabela. En la Magdalena -oye, no olvides, música de Pablito Milanes- la corista se trastocó en sensual puta, “te advertí de este numero pero jamás pensé que lo forjarías con tanta convicción”, dijo en bergantín. El barbudito guitarrista hizo de Fito en el blablablablabla., una señorita quiteña prendida a un alambre de púas lloraba quien le ha robado el mes de abril. Entonces el juglar habló de la sequía creativa y dijo que las canciones nacen en los bordes del abismo y no en la calma domestica (glup¡), “era una época de sosiego para mi y las musas se fueron a follar con Serrat hasta que nos encontramos con el poeta Benjamín Prado, terminamos en resaca cantándole a Praga. (Entre nos, la parcería poética de Vinagre y Rosas aun no termina de convencerme, hasta compré el original. En el texto, a Sabina no lo prefiero compartido).
Impresionante fue cuando Joaquín agarró la goudin negra, toco dos res agudos, el monstruo comprendió la señal y estalló… entonces fue completando la intro de 19 días y 500 noches, el mejor coro de la noche Que temon. Luego, una estrategia de la edad: hacer cantar uno por uno a sus músicos. Me senté pensando: son 20 años que estoy con Sabina, lo conocí en Japón el ’90 gracias al único amigo dominicano que cantaba en saudades “oiga doctor devuélvame mi depresión”. Son 20 años con este tripulante nostálgico (debo ser su relación mas larga), con este pirata vate urbano, innovador de la noche que mira la vida con la gracia del superior y acrecienta las formas haciendo parir al soneto mayor. Está dicho: el desafío de mis ídolos de la canción de autor es vencer al tiempo, llegar a la eternidad. Mirad : Caetano Veloso (74¡),Silvio Rodríguez (67), Serrat (67),Chico Buarque (66), Pablo Milanes (67) Joaquín Sabina(61) son el mejor ejemplo de amor a la vida y amor a la muerte en simultaneo que los hace ser mortales que no van a morir.
Este Sabina más lozano que los del trío telonero le metió dos horas de concierto con su sonrisa de placa diplomática, su voz expresiva -pese al uso y abuso-y terminó saltando tres bises vía combo mariachi, con aquel perfecto estribillo del morir contigo si te matas para que el fin del mundo te pille bailando mientras nos dieron las 12 con el demiurgo domesticado para siempre. Salimos del concierto colmados de vida, con la tristeza del que separa sus partes, con la emoción de respirar el privilegio de haber estado en una ofrenda memorable. Directo a brindar por Vinagre y rosas, por los cuarenta y veinte de Sabina, por su pintita de viejo sexi macetero, de Daniel el travieso en k’aibito, por su profesionalismo cabal que nos convenció: la muerte no existe. Gran Sabina, pluma mortero, que te fuiste trotando, huyendo de nuestro amor y diciendo: mi manera de comprometerme fue darme a la fuga.

Quito, Junio 2010.

viernes, 4 de junio de 2010

COMPRANDO MILLAS

Por: El Papirri
De pronto mi oficina se colmó de murmullos, solo se entendía algo de millas. La abstracción me apartaba del asunto hasta que el vecino de escritorio declaró en pianisimo y temeroso de qué se trataba. Había que ir a la única línea aérea que viaja a Bolivia a invertir comprando millas 2 por 1.No estaba muy convencido, pero las falsas razones que inventamos con Carolina impulsaron la desishon y ahí me tenias, en sábado, 11.00 de la mañana, con unas 20 personas esperando en sus numeritos confusos. De pura suerte agarré un asiento, increpando a un televisor pude constatar que tenia diez turnos que esperar y solo habían dos ñatas atendiendo, para colmo un cargoso colombiano demoraba media hora en comprar sus famosas millas. Cuando estaba a punto de desanimarme pude escuchar que estaba rodeado de bolivianos, bolivianos elegantes, que hablaban con la r de gringo, ropa de marca, todos blancones o semi blancos. Una pareja de spot de taquiña discutía cuantas millas comprar para vacacionar en Miami. El men vestido en sport - golf llevaba camisa de seda azul, lentes de marca, sonrisa perfecta, la pelada ya se le veía encima, se notaba el Gym diario, una manito coqueta en la cintura, la otra revoleaba el llavero de la mistsubishi ultimo modelo roja que le esperaba afuera con dos niñas perfectas sentadas adentro. La esposa era una flaquita alta de cara agraciada, rubia a la fuerza, de mal gusto al vestir pero con botas carisimas. Cuando les tocó el turno, el perfume importado de ambos sitió la oficina. Arremetieron varios minutos hablando de miles de millas para Flavia y Joselin, sus hijitas. Entonces surgió el parloteo del otro lado, un cochalo canoso cuarentón de marca le decía a un sucrense de apellido:
-si pues, mestoy comprando millas para ir a ver la hacienda… los indios se están queriendo entrar, Sabias lo del Ricardo, no? se fue a Miami a vivir, se descuidó y ya le quitaron dos hectáreas estos indios del Evo…así que anda nomás, Y por que no le hablas al neurólogo de tu curso del San Agustín, ese tiene llegada al Arce, te puede ayudar , No creo, jodido está, menos mal que nos hemos venido acá, ya nos hubieran quitado todo estos indios.
El dialogo transcurrió como si yo fuera el hombre invisible, entonces otra pareja convocó para la noche, nuestro grupo los chaaaquis, jugar un poker, abrir un singanito, No, yo wiski nomás, ay¡ nuestros hijos darán brillo a la piscina, Yo llevo la carne, Yo la música de los Kjarkas,… puro caporales pero… cuidado traigas tus choladas de morenadas tan horribles, La Erikita va a venir con el Mc Clean, Ha llegado? Si, está seria la cosa…amaaado, decidió hacer escala y después seguir a Boston.
Otros dos con pintas de caporales San Simón hablaban seriamente de sus acciones bancarias. Entonces se acercó la pareja del spot de taquiña, ella dijo en paceño del sur: Tu no eres, essseee…tienes una canción… filosofía publica creo, como se yama ?... El cuasi pelón me vio de pies a cabeza con gesto de asco y continúo su camino, Ah ¡metafísica popular, le dije, Si eeesa, esa me gusta, solo esa pero…una vez fui a verlos tocar con el Griyo, en un boliche de la 6 de agosto…mi marido se pone celooooso porque el Griyo era mi chico en el Calvert.
Entonces, cuando ella trataba de presentarme a todos los chaquis, me salvo el gong del turno. Mientras me informaban el asunto de las millas para algún día ir a Bolivia, se escuchaba atrás, Pero no lo invites, es muy faroso, Si, es un cholo de ojos verdes, carcajeaba atorado otro, Y peor, es masista, después va a estar hablando de nosotros.
Mientras la señorita explicaba que las famosas millas solo se usaban cuando la empresa quiera, pude divisar por el espejo cómo aquellos bolivianos se iban en caravana de autos lujosos, solo faltaban las banderas de Podemos. Nunca los había visto en Quito, los hermanos que me frecuentan son pintores de brocha gorda y flaca que se asientan en el parque del Ejido. O divorciadas con hijos mix. En el taxi pensaba que mis roces con la oligarquía boliviana realmente fueron mínimos. Por suerte. Adoran los esteits, su humor es racista, se casan entre ellos, bailan caporal, no tienen carnet de identidad sino tarjeta de crédito, no tienen patria, tienen inversiones. Soy demasiado cholo para sus gustos refinados de cumbias y bilingüismo. Y se la pasan discutiendo a donde llevarse el dinero. Si pudieran se llevarían sus hectáreas más, dentro de las millas.

Quito, Mayo 2010.

viernes, 14 de mayo de 2010

BAILECITO TERAPEUTICO

Por :El Papirri


DIOS NOS LIBRE AMOR MIO
DE LOS ABOGADOS
TINTERILLOS CON SU OFICIO
SIEMPRE DEMORADO

DIOS NOS LIBRE AMOR MIO
DE LOS MATASANOS
DOCTORCITOS
QUE TE CURAN
DÓLAR EN LA MANO

BIEN LEJITOS ESTAREMOS—SI ¡¡
DE ESTOS PERSONAJES
CON TU AMOR, LUZ Y TERNURA—SI ¡¡
LA VIDA ES UN HOMENAJE

LALALALALA

DOS DOS DOS,

DIOS NOS LIBRE AMOR MIO
DE LA POLICIA
CON SU SOCIO PREFERIDO
ROBANDO EN LA VIA

DIOS NOS LIBRE AMOR MIO
DE LA BUROCRACIA
CON SU LEMA PREFERIDO
VUELVASE MAÑANA

BIEN LEJITOS ESTAREMOS—SI¡¡
DE ESTOS PERSONAJES
CON TU AMOR, LUZ Y TERNURA—SI¡¡
LA VIDA ES UN HOMENAJE

LALALALA

Tres tres

DIOS NOS LIBRE AMOR MIO
PRESTAMO BANCARIO
INTERESES
DEVORANDO MI POBRE SALARIO

DIOS NOS LIBRE AMOR MIO
DEL ESTAFADOR
JAVIER LOZA VILLAMIL
LA PUTA QUE TE PARIO

BIEN LEJITOS ESTAREMOS—SI¡¡
DE ESTOS PERSONAJES
CON TU AMOR, LUZ Y TERNURA—SI¡¡
LA VIDA ES UN HOMENAJE

EN EL FESTIVAL CANTO DE TODOS

Por: El Papirri
Sorpresiva llegó la invitación: el Papirri de Bolivia invitado por el Ministerio de Cultura de Ecuador y el ALBA Cultural para tocar el 1o de mayo de 2010 en el Festival latinoamericano y del Caribe “Canto de Todos” con aire ochentero trovadoresco. Supe entonces que tocaría con Vicente Feliu de Cuba, Pancho Villa de Chile, Ricardo Flecha de Paraguay, Hugo Idrovo de Ecuador, Cecilia Todd de Venezuela y Pueblo Nuevo de Ecuador. Todos sumábamos 600 años de edad y seguíamos en escena. Se removió el recuerdo siempre calido y digno de Vicente Feliu, histórico trovador cubano, autor de la hermosa “Créeme” quien tuvo algunos pasos por Bolivia, uno de ellos dramático en febrero de 1980 gracias a García Meza and company cuyos detalles me preguntó Silvio Rodríguez el 2007 en Madrid en el Homenaje a Noel Nicola, pero esto merece dos crónicas aparte.
Una mala: no pagaban la llegada mis músicos; estos mich’as aprovechaban la estadía de el Papirri en Ecuador para invitarlo al Festival. Entonces el organizador del evento me dio el fono de un músico ecuatoriano llamado gravemente Stalin Gonzáles que podría ayudarme y con quien tuvimos un primer encuentro en su estudio, todo fuera de horario de oficinas por si acaso. Stalin era un rastra parecido al Willy Claure que tocaba el bajo, toda mí querida mañana del sábado escribí las partituras que el cuate empezó a leer a primera vista en la tarde, luego pulsó la guitarra tocando “La Catedral” de Barrios Mangore: me dejó cojudo. Se iba a Asunción al día siguiente, el Festival Canto de Todos esa semana se llevaba a cabo allí, me contó que mis cumpas del Dúo Negro y Blanco representarían a Bolivia, les mande saludos. Nos despedimos mientras me facilitaba los teléfonos del charanguista y del quenista .
Una noche de esas nos reunimos con Víctor Sánchez y Oscar Velazquez, el primero agarro el charango y principió con “Bien le cascaremos” como si lo conociera, luego pulso la guitarra tocando My Spanish Heart de Chick Korea. Grave. El segundo, de nacionalidad colombiana, comenzó a tocar mis melodías en quena, luego las traspaso a zampoña, luego a clarinete. Súper. Entonces ya estábamos viajando el sábado 1o de mayo en un minibus stronguista a Santo Domingo de los Tsachilas, una ciudad a 4 horas de Quito, rumbo a la costa ecuatoriana. Llegamos directo a un hotel tropical a almorzar arroz con mariscos ardientes y limonada helada. Por fin ensayamos los cuatro en mi habitación dirigiéndonos luego a la prueba de sonido: un aparataje de última tecnología florecía en el escenario gigantesco. La prueba fue mala, la lluvia reventaba el techo del coliseo, nos desanimamos y nos fuimos al hotel a descansar un poquitín. Cuando volvimos, el coliseo estaba repleto con 4000 ecuatorianos bien sentaditos. Entonces llego el abrazo esperado con Vicente Feliu, los besos con el Panchito Villa y ver todos sorprendidos en la pantalla gigante al paraguayo Flecha, un gordito tenor de voz prodigiosa que fue ovacionado. La venezolana Cecilia Tood resultó ser una sugestiva cantante y cuatrista con sus acompañantes haciendo aquella rítmica imposible. Luego ingresó Hugo Idrovo con su guitarrita, interesante trovador ecuatoriano con voz de aguardiente y versos certeros. Entonces entramos con todo, arrasamos con nuestros aires andinos, con los coros en Que tal metal y la seguridad de aquellos músicos excelentes. Al salir de escena me quedé a admirar a un Vicente Feliu intacto, con voz ronquita y precisión en la guitarra. Y el público siempre atento: nunca vi algo así considerando que eran miles y costeños. Prontamente vino el festejo que se prolongó toda la mañana del domingo en la costa con un ceviche delicioso. Y llegar directo a apoyar la actuación del Grupo Arawimanta que logramos participe en la Bienal de Músicas del Mundo, las chicas hacían tronar sus zampoñas y tarkas en medio del centro histórico de Quito. Cerramos un domingo glorioso tocando k’antus en mi departamentito hasta que los vecinos timbraron. Fueron 8 meses de espera para un fin de semana como los de antes. Por fin algo penetrante en este Quito de cartas, neblinas, médicos y llovizna. Es que ahora soy oficinista, sobrio, monógamo, cuasi vegetariano y estas rarezas se las aprecia muuucho mas.

martes, 11 de mayo de 2010

PRIMERO DE MAYO EN SUCRE

Por: El Papirri
Había tenido un infarto digestivo con clínica y todo, el cuervo de blanco dándome el alta dijo, severo: sr. monrrroy tiene el hígado en fibrosis, el páncreas perturbado y el colon erosionado… y empezó la larga lista de prohibiciones mientras se relamía cuando hablaba de los chorizos. Cuando llegó a los tragos el rictus se le volvió sonrisa y concluyó: técnicamente Ud. esta jodido. Bajón. Saliendo de la clínica sonó el celular, tenia voz de singanito del sur el que llamaba, Papirriii? soy el Wilson de la Central Obrera Departamental de Chuquisaca, Como es hermano, Queremos que vengas a tocar a Sucre para el 1 de mayo, es un acto de desagravio al frente de la Casa de la Libertad, en el mismo lugar donde los hicieron arrodillar a los indígenas el año pasado, dijo.
Entonces me vino la ráfaga del escenario, la rabia por lo acontecido y también el torbellino de la factura que le debía al dueño de la clínica que- como buen stronguista- me dio plazo de un mes para pagar. Una de mis guitarras tenía pinta de billete con alitas. Jodido de salud estoy, hermano, le dije y se la puse difícil con el precio de la actuación. Contra todo pronostico el ñato dijo ya¡, pero te damos un cheque global al llegar. Además con picantito te vamos a esperar, dijo, mientras me daba una arcada.
Así, quemando aceite, decidí ir a tocar a Sucre, en plena Plaza principal, convaleciente, con mi guitarrita en la espalda, mí querido batero Vico y sin bajista pues no quiso ir de miedo. Salimos el mismo día en el primer vuelo, las nubes me decían que la última vez que había tocado en Sucre había sido también en la Plaza, con Matilde Casazola, en abril del 2007 para una ONG alimentaria. Dos años después, un 1 de mayo del 2009, volvía a la Plaza de Sucre en un ambiente francamente hostil.
Llegamos al aeropuerto a los rebotes, el Wilson esperaba impaciente, directo a un auto y a la Plaza .Cuando salí del carro un joven universitario me gritó: Papirri, cabron evista¡ De un balcón una doña lanzó: te vamos a cascar, llama¡ Llegando a la Plaza pude identificar dos escenarios, frente a la Casa de la Libertad nuestra tarima con un sonido regularote en donde se desplazaba pesadamente un grupo de teatro juvenil interpretando algo sobre la muerte; justo en la espalda, un tremendo escenario en el que la alcaldesa hacia su propio acto a pura cumbia. En el nuestro habían unas 20 personas, en el otro, una multitud se sacudía. Ya era medio día, el sol arrasaba. El maestro de ceremonias anunció: ahora con Uds., desde La Paz, la canción social de Manuel Chazarreta, el Papirri ¡Cuatro aplausos. Ahí nos veías con el Vico, k’asas, sin bajista. Le metí un Domínguez furibundo, poco a poco la gente del acto de atrás se fue viniendo, una señorita guapa pidió: la guacataya¡¡.entonces la invité al escenario, subió con su hermana mas, ambas veintiañeras vallunas de generosas tetas y buenas caderas. Ya tenía corito. “La guacataya, la guacataya”, cantamos rico, bailando, luego vino “Bien le casaremos” con zapateada. Con “Que tal metal” subieron dos niños a escena, entonces me di cuenta que el acto de atrás se había venido al nuestro y doña Haydee se había quedado solita con el Fidel que puteaba. Cuando empezábamos la Metafísica Popular salio de la Casa de la Libertad una comitiva de momias de terno con sus condecoraciones, eran los de la Corte Suprema mezclados con el Rotary club, aturdidos, amarillos, asustados, pasaron al trote, algunos al escuchar las primeras Metafísicas se iban frenando, la algarabía era total. Terminamos en fiesta., salí del escenario sudando aquel sol de medio día valluno, la gente pedía otraaaa, el Wilson gritó una de protesta pues, para eso te hemos traído¡, y ahí nomás le casque “Hay que tomar partido” contra el racismo, contra la violencia, contra las dictaduras, canción motivada en el 11 de enero cochabambino. Súbitamente en mitad de la canción explotó algo y se cortó la luz. Salí del escenario mareado, una señora quería que le firme un disco, un fabril gritaba: no le des, es la esposa del Barrón ¡, uno de la COD se quitoneaba con otro de la alcaldía unos cables, Vamos a cascarle una chichita con picante, dijo con voz de F.M el maestro de ceremonias en su abrazo sudado. Cuando llegó el primer piedrazo apareció como virgen morenita una señora guapa de rulitos y me dijo soy el Defensor del Pueblo, Como podrá ver yo soy el delantero del pueblo, le dije… Mejor vámonos Papirri, dijo, y nos escabullimos con el Vico y las tetudas a la casa de la señora que era ahicito. Cuando cerró la puerta colonial de su casa, el hígado me volvió al cuerpo. Pasé la tarde mirando los coctelitos de Alcalá desfilar por mi nariz, con el picante no pude y le casqué nomás. Ya por el atardecer, lo tuve que sacar al Vico a los empujones directo a la Terminal, justo salía un bus a Oruro, la tetonita mayor, mareadita, decidió acompañarme, Por ahí no te veo mas… suspiraba en agudo. Los detalles de aquel viaje nocturno no puedo dar en este periódico decente. Aquel 1o de mayo del 2009 fue mi último concierto en Bolivia, en aquel Sucre al borde de un ataque de nervios.

Quito, Mayo 2010.